Su ingesta se asocia significativamente con el diagnóstico del trastorno mental y con una mayor severidad de los síntomas, a través de modificaciones en la composición de bacterias intestinales, especialmente en mujeres.
El efecto reductor se manifiesta en pacientes con alteraciones específicas en la vía PI3K que reciben el fármaco como tratamiento adyuvante, abriendo nuevas oportunidades para estrategias preventivas personalizadas.
Análisis genéticos demuestran una relación causal entre ambas condiciones, resaltando la importancia de considerar este trastorno autoinmune como factor de riesgo.
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La incorporación de trímeros que imitan la estructura natural de la envoltura viral y están anclados a la membrana representa un avanc...