Fortalecen medidas preventivas para el virus sincicial
El doctor Pablo Jorquera, pediatra broncopulmonar del Hospital Sótero del Río entrega una actualización sobre síntomas y prevención de este cuadro infeccioso.
Cada año, un promedio de cinco mil niños deben hospitalizarse debido a la presencia del Virus Respiratorio Sincicial (VRS). Por lo general, su aparición se da entre los meses de mayo y septiembre, aunque su alza es entre julio y agosto.
Según destaca el doctor Pablo Jorquera, el VRS es una de las primeras causas de infección respiratoria aguda baja, siendo la población más susceptible los menores de un año de vida, "en especial lactantes, adultos mayores y personas inmunodeprimidas".
Este virus se transmite a través de secreciones respiratorias que se expanden al hablar, llorar, estornudar o toser, y también por medio de las manos y objetos que han estado en contacto con secreciones respiratorias de personas infectadas. "Los síntomas más comunes que los padres deben considerar son tos, dificultad respiratoria, quejidos y hundimiento de las costillas al respirar, aleteo nasal y cianosis -piel de color azul alrededor de la boca-. En ocasiones puede haber presente también irritabilidad, rechazo de alimentación o fiebre", destaca.
En la actualidad la infección por VRS no implica necesariamente la hospitalización de los niños, de hecho, sólo el 2% de los menores de dos años se hospitalizan. De acuerdo a lo que señala el especialista, “este es un virus que se puede presentar también en adultos, pero en menores de seis meses puede ser más grave aún, ya que su vía área es más pequeña siendo más fácil que se obstruya por la inflamación y las secreciones generando un cuadro de dificultad respiratoria, el que habitualmente se presenta como una bronquiolitis”, agrega.
En torno a las medidas preventivas, el especialista aconseja evitar que el niño o bebé esté en contacto con personas que están enfermas, no concurrir a espacios con aglomeraciones de personas, practicar un adecuado higiene de manos, y mantener la lactancia materna exclusiva hasta los seis meses y de manera complementaria hasta los dos años: "los niños amamantados tienen menor riesgo de adquirir una infección respiratoria y menor riesgo de requerir hospitalización en caso de contagio", aseguró.
Si bien para el VSR no hay vacuna, existe un anticuerpo monoclonal específico contra este virus - Palivizumab- que es recomendado por la Academia Americana de Pediatría y que es aconsejable utilizar en los casos de enfermedad pulmonar crónica del prematuro, prematuros extremos y cardiópatas de rangos de edad menores a uno o dos años.
