Especialista reflexiona sobre nutrición de los chilenos
En el marco del Día Mundial de la Alimentación la nutrióloga Sofía Araya Moreno de Clínica Bupa Antofagasta hizo un llamado a cambiar los malos hábitos de la población.
Según el informe “Panorama de la Seguridad Alimentaria y Nutricional de América Latina 2016”, desarrollado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), un 67% de la población adulta en Chile tiene sobrepeso u obesidad.
Considerando sólo a la población de más de 20 años, el país ocupa el décimo lugar entre los países con más población con exceso de peso y el vigésimo entre los más obesos. La causa: sedentarismo y alimentación errónea, donde los excesos de grasa y azúcares están presentes.
Para promover la concienciación y la acción a escala mundial para aquellos que padecen hambre y la necesidad de garantizar la seguridad alimentaria y dietas nutritivas para todos, la FAO celebró el Día Mundial de la Alimentación con una serie de eventos en más de 150 países.
La nutrióloga Sofía Araya Moreno de Clínica Bupa Antofagasta aprovechó esta instancia para invitar a la comunidad de la región a reflexionar sobre cómo es la alimentación de los chilenos.
La especialista explicó que “ésta cuenta con –al menos- tres comidas al día. Sin colaciones intermedias y con una mayor tendencia a comer fuera de casa y ojalá rápido. En el caso de las personas más jóvenes, tienden a saltar el desayuno, lo cual es un pésimo hábito. Con respecto a los grupos de alimentos, es muy marcado el consumo de pan, embutidos y quesos grasos, sin contar con que somos campeones en el consumo de bebidas azucaradas de fantasía, que solo aportan azúcar refinada a la dieta”.
Además, agregó, “los chilenos no tienen el hábito de cenar, sino que toman once con pan y acompañamientos. Si bien el consumo de verduras y frutas ha mejorado, aún se encuentra lejos de los índices recomendados. Lo mismo ocurre con el pescado, a pesar de vivir en un país con mucha costa. En resumen: tenemos un alto consumo de masas, azucares refinados y grasas saturadas y, a todo lo anterior, podemos agregar que no hay cultura de actividad física, lo cual nos hace estar hoy dentro de los países con más sobrepeso y obesidad en el mundo”.
Para la doctora Araya “lo fundamental es la conversación familiar, en donde todo el grupo tenga el mismo objetivo: comer más sano y tratar de adquirir mejores hábitos; consumir –al menos- dos litros de agua al día; tratar de cocinar en casa; realizar tres comidas al día y, ojalá, dos colaciones pequeñas; restringir el consumo de azúcar refinada, grasas saturadas; y aumentar el consumo de verduras, frutas y carnes magras”.
Asimismo, recomendó que cuando ya exista un problema de sobrepeso u obesidad se consulte a un profesional entendido en el tema, “para guiar una baja de peso saludable, balanceada y responsable”.

Dra. Sofía Araya Moreno