Hospital Barros Luco celebra día mundial del riñón
La importancia de donar junto con realizar controles preventivos destacaron durante la conmemoración de la ceremonia realizada el frontis del Centro de Diagnóstico y Tratamiento (CDT) del Complejo Asistencial Barros Luco.
Durante cinco años consecutivos el recinto de salud lleva conmemorando esta iniciativa nacida desde la Internacional Society of Nephrology y de la International Federation of Kidney Foundation, con el fin de informar y concientizar sobre uno de los principales problemas de salud pública del siglo XXI como lo es la enfermedad renal crónica.
La ceremonia, la cual reunió cerca de 65 asistentes, entre médicos, pacientes y enfermeras, contó con la presencia de la Subdirectora Médica de Atención Abierta del hospital Barros Luco, doctora Gisella Castiglione y las doctoras Jacqueline Pefaur (jefa del Departamento de Nefrología de la institución) y Haydee Mellado, junto a diversas autoridades.
Se estima que más de 1,5 millones de personas en el mundo se encuentran actualmente en diálisis o han sido trasplantadas, y nuestro país no se ha quedado exento de esta problemática, llegando a más de 20.000 pacientes en tratamiento sustitutivo renal (diálisis 18.000 y 6.000 han recibido un trasplante), por lo mismo la importancia de una detección precoz que permita prevenir a tiempo el agravamiento y la progresión de la insuficiencia renal.
La doctora Pefaur dio inicio la actividad enfatizando en la prevención de la enfermedad renal crónica y la importancia de ser donante, invitando a todos los asistentes a colocar sobre la mesa de sus hogares el tema de la donación de órganos y a ponerse en el lugar de los trasplantados.
“Las principales causas de la falla renal terminal son la nefropatía diabética y la hipertensión arterial, pero sobre todo la primera, un 35% de los pacientes que llegan a diálisis lo hace por diabetes, 12% por hipertensión y el 10% tienen enfermedad glomerular que progresa a insuficiencia renal terminal”.
Posteriormente, la especialista sostuvo que es importante incentivar el consumo de alimento saludable en la prevención primaria. “Es primordial que en dicho proceso se informe a la gente lo vital que es aumentar el consumo de vegetales y disminuir la cantidad de grasa y de sal en las comidas; mejorar la capacidad física haciendo algún deporte, si la población tomara estas medidas, la incidencia de diabéticos que hay actualmente del 4,2% disminuiría. Lamentablemente, ese grupo no se controla adecuadamente, aumentando el riesgo de que progrese la enfermedad renal crónica”.
En materia de prevención en la población sana, la profesional destacó la importancia que se controlen a partir de los 30 años si tienen algún antecedente familiar de enfermedad crónica renal. “En esos casos deberían controlarse de forma anual, o cada 2 ó 3 años si es que se le ha encontrado evidencia de alguna patología, pero la gente que tiene mayor riesgo de enfermedad renal son los diabéticos, hipertensos, obesos, fumadores, y personas mayores de 60 años”.
La jornada finalizó mediante emotivos testimonios, donde destacó el de un niño trasplantado que será sometido a una nueva intervención recibiendo en esta oportunidad un riñón de su hermano que donará su órgano en vida.
La carpa contó con un stand de voluntarios que tomaron la presión arterial y entregaron información sobre la prevención de la enfermedad renal crónica.


Dra. Jacqueline Pefaur Penna

Dr. Pedro Onell Bravo

Dras. Gisella Casteglione, Jacqueline Pefaur y Haydée Mellado