Abordaje tubular parafascicular para la resección de tumores cerebrales en áreas elocuentes
Los tumores cerebrales localizados en regiones que controlan el habla, la visión y la función motora presentan retos adicionales ya que dañar el tejido puede causar una pérdida grave de esas capacidades.
Desde las primeras craneotomÃas no accidentales, a finales del PaleolÃtico y principios del NeonolÃtico, hasta nuestros dÃas, la craneotomÃa ha sufrido modificaciones sustanciales. Inicialmente, eran necesarias grandes craneotomÃas con gran exposición cerebral para una adecuada orientación anatómica, mejor luminosidad intraquirúrgica y mayor recorrido quirúrgico teniendo en cuenta el tamaño del instrumental quirúrgico y el número de personas necesarias para una intervención. De forma similar al advenimiento de la microcirugÃa, el papel de las técnicas mÃnimamente invasivas en el campo de la neurocirugÃa cerebral ha crecido en las últimas décadas
El Dr. Paolo Palmisciano, de la Universidad de Cincinnati, formó parte de un equipo de investigación que examinó la eficacia de un método mÃnimamente invasivo para limitar la pérdida de visión y audición en pacientes operados de tumores cerebrales. Este consiste en un pequeño tubo que implica la extirpación de una porción mucho más pequeña del cráneo, y no hay necesidad de retraer el cerebro.
Dado que la tecnologÃa de obtención de imágenes señala dónde se encuentra el tumor, dónde hay que evitar el tejido cerebral importante y cuál es la distancia más corta, el tubo puede introducirse directamente en el punto exacto del cerebro donde se encuentra el tumor, para luego extirparlo.
El equipo de investigación analizó los resultados de 72 pacientes que se sometieron a cirugÃa para extirpar tumores cerebrales en áreas elocuentes utilizando el abordaje tubular entre 2018 y 2021 en el Hospital Infantil Universitario de San José en Bogotá, Colombia. Debido a que los tumores cerebrales en áreas elocuentes son relativamente raros, el estudio observacional prospectivo no se limitó a un tipo o región especÃfica de tumor cerebral.
El objetivo era ver si podÃan tener una menor incidencia de complicaciones y también discutir la técnica.Â
AsÃ, descubrieron que a casi el 95% de los pacientes del estudio se les extirpó todo el tumor mediante el abordaje tubular.
Tras la intervención, el 9% presentaron déficits nuevos o peores en el habla o la función motora, lo que está dentro de la tasa de complicaciones esperada para la cirugÃa de extirpación de tumores en estas zonas del cerebro.Â
De cara al futuro, Palmisciano señaló que los estudios deberÃan analizar la eficacia del abordaje tubular en tipos de tumor especÃficos y en regiones más concretas del cerebro para permitir una comparación directa.
Al igual que con cualquier técnica quirúrgica, los neurocirujanos no podrán un dÃa pulsar un interruptor e implantar abordajes tubulares si no los han utilizado antes. A medida que se publiquen más datos sobre su eficacia, será importante que cada cirujano que desee utilizar un abordaje tubular estudie y practique la técnica antes de utilizarla en un quirófano.
