Odontología
Los empastes de mercurio no tendrían efectos negativos
A pesar que se estiman más de 70 millones de restauraciones dentales con amalgamas anualmente en los Estados Unidos, los riesgos de salud planteados por la potencial liberación de mercurio, a la forma de vapor de mercurio, en el interior del organismo siguen siendo confusos (los empastes contienen 40%-50% de mercurio). Las exposiciones ocupacionales que provocan niveles de mercurio en la orina mayores de 50 µg/L se han asociado a varias debilitaciones neurológicas, renales, e inmunológicas. Los potenciales efectos de concentraciones más bajas también han sido evaluados, pero los resultados no son consistentes o concordantes. Los estudios en odontología han determinado niveles urinarios del metal de sólo 4 a 10 µg/L, los cuales se han relacionado de forma inversa con los resultados en pruebas de desarrollo neurológico, incluyendo memoria, atención, coordinación, estabilidad motora y humor, pero concretamente no han podido confirmar una asociación estadísticamente significativa entre el mercurio y la función neuronal.
Para comparar la función renal y neurosicológica en niños con caries dentales que fueron restauradas utilizando amalgamas o materiales libres de mercurio, neurólogos del Hospital Infantil de Boston (Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard, Boston, Estados Unidos), asignaron de manera aleatoria un total de 534 niños de 6 a 10 años sin previas restauraciones a dos grupos diferentes. Unos fueron tratados con compuestos de amalgama (n = 267) y otros con empastes de resina (n = 267). A todos se les hizo un seguimiento durante 5 años. También se incluyeron pruebas de memoria, visuales y motoras. La función renal fue medida por la albúmina y creatinina en orina.
Los niños tuvieron una media de 15 superficies dentales restauradas durante el período de cinco años. El grupo de la amalgama fue asociado a niveles urinarios de mercurio considerablemente más altos (0.9 frente a 0.6 microg/g de creatinina, P < 0.001). Después de ajustar según aleatorización y otras covariables, no se encontró ninguna diferencia estadística significativa entre los niños con amalgamas y el grupo con compuestos de resina en relación a la escala de inteligencia (3.1 versus 2.1, P = 0.21). Tampoco se encontró ninguna diferencia estadísticamente significativa para el cambio de cuatro años en el índice general de memoria (8.1 versus 7.2, P = 0.34), en las evaluaciones visuales y motoras (3.8 contra 3.7, P = 0.93), o en la albúmina urinaria (media, 7.5 frente a 7.4 mg/g de creatinina, P = 0.61).
En conclusión, en este estudio, no existieron diferencias estadísticas significativas en los efectos neuropsicológicos o renales en un lapso de tiempo de cinco años en niños que sufrieron restauración de caries usando materiales dentales de amalgama o empastes de resina. Aunque es posible que mínimos efectos sobre la inteligencia no puedan ser eliminados, estos resultados sugieren que las rehabilitaciones con empastes de mercurio no requieren ser la base de decisiones de tratamiento a la hora de elegir los materiales dentales restaurativos.
Fuente bibliográfica
JAMA. 2006 Apr 19; 295(15):1775-83