https://www.savalnet.cl/mundo-medico/reportajes/el-conocimiento-cientifico-que-derriba-la-discriminacion.html
19 Enero 2015

El conocimiento científico que derriba la discriminación

Psiquiatras, psicólogos, terapeutas ocupacionales y trabajadores sociales se reunieron en Concepción, Chile, para abordar las nuevas pautas en el manejo conductual de los niños con síndrome de Asperger.

El síndrome de Asperger es un trastorno del desarrollo con base neurológica, de causa desconocida en la mayor parte de los casos, caracterizado por alteraciones en tres áreas principales: social, comunicación y patrones conductuales y de intereses restrictivos y estereotipados.

Se trata de una condición que pertenece al espectro autista, diferenciándose del autismo al presentar mejor funcionamiento en habilidades básicas del lenguaje, aunque existan casi siempre dificultades más sutiles en lo que se refiere al lenguaje pragmático-social.  El síndrome de Asperger es esencialmente un trastorno de la relación social y sus principales manifestaciones conductuales abarcan una amplia gama de déficit, entre los que destacan los problemas para formar amistades, el fracaso en el uso y comprensión de las pautas no verbales de la comunicación, la escasa comprensión de las reglas y convenciones sociales y la capacidad disminuida para la reciprocidad social y emocional.

Otras características propias de las personas que padecen este trastorno son la falta de habilidades de organización, planificación, comprensión, interpretación y evaluación crítica de la información adquirida. Dificultades con el pensamiento abstracto, falta de motivación en áreas lejanas a su interés y rigidez en sus planteamientos y opiniones. También presentan con frecuencia problemas de coordinación motora e hipersensibilidad sensorial (no toleran ciertos ruidos o luces muy brillantes).  En contrapartida, algunos de sus puntos fuertes son una inteligencia normal o superior, buen vocabulario, excelente memoria mecánica, intereses extraordinariamente definidos y el buen manejo de datos en áreas que cautivan su atención, habitualmente la tecnología o ciencia.

Fue el pediatra, investigador y psiquiatra austriaco Hans Asperger (1906 - 1980) quien inició la exploración en este campo, aunque gran parte de sus estudios sobre trastornos mentales y desordenes psicológicos, particularmente en niños, alcanzaron masividad una vez fallecido. Claro que esa masividad apunta estrictamente a la comunidad científica, porque en la población general lo que prevalece es el desconocimiento.

Su inquietud por este tema fue temprana, al punto que ya en su tesis doctoral, publicada en 1944, introdujo el concepto de Psicología Autista de la Infancia, el que con los años pasaría a llamarse síndrome de Asperger, denominación dada por la psiquiatra inglesa Lorna Wing, quien fue la primera en rescatar su trabajo y proyectarlo, en 1981, hacia la comunidad científica internacional. Hasta entonces, la gran mayoría de los estudios del austriaco estaban escritos en alemán y con escasas traducciones, incluso varios de sus postulados fueron destruidos durante un bombardeo cerca del final de la Segunda Guerra Mundial. A esto se debe sumar que la orientación del trabajo de Asperger desafiaba los patrones que predominaban en esta área de la psiquiatría, establecidos por Leo Kanner en 1943.

En su tesis, Asperger hace una descripción de esta condición y sus distintas manifestaciones, reconociendo la aparición de los síntomas entre los 2 y 3 años de edad, mayormente en varones. Descubrió en estos niños una extraordinaria capacidad para hablar de sus temas favoritos con gran detalle y profundidad, por eso los llamó “los pequeños profesores”. Convencido de que sus talentos y habilidades se verían plasmados en la adultez, el investigador realizó un seguimiento a uno de sus pacientes, el que con el paso del tiempo se convirtió en maestro de astronomía, resolviendo incluso un error en el trabajo de Isaac Newton que había advertido durante su infancia.

Sensibilización con bases médicas

Una de cada 88 personas presenta este trastorno, incidencia que llama a diseñar estrategias de acción transversal que favorezcan el desarrollo e integración de quienes lo padecen. En este contexto, a fines de 2014 se realizó en Concepción, Región del Bío Bío (Chile), la jornada denominada “Sensibilizando a la comunidad sobre el síndrome de Asperger”, encuentro de carácter multidisciplinario organizado por la Unidad Ambulatoria de Salud Mental y Psiquiatría Infanto Adolescente del Hospital Dr. Guillermo Grant Benavente.

Durante el inédito evento científico, que reunió a destacados psiquiatras, psicólogos, terapeutas ocupacionales y trabajadores sociales, se recalcó que todas las personas que sufren esta condición manifiestan un conjunto de falencias significativas en las áreas de la comprensión social, adquisición de habilidades sociales, comunicación no verbal y reciprocidad emocional. Es más, la gran mayoría de ellos son consientes de su soledad y se sienten frustradas por sus dificultades sociales, sin comprender en esencia la naturaleza de las razones por las que han arrastrado un historial de marginación y fracaso en el establecimiento de relaciones de amistad con otras personas de su edad.

“Esta instancia se enmarca en la necesidad de difundir los alcances y características del síndrome de Asperger, con el fin de hacer frente al desconocimiento que existe en torno a este tema y propiciar la inclusión social de personas que son diferentes y que tienen capacidades y habilidades distintas a las comunes”, comentó la doctora Paola Oñate, psiquiatra infantil y adolescente. 

Otro objetivo cumplido en la jornada llevada a cabo en Concepción fue la presentación formal de una nueva agrupación de padres de niños y adolescentes con Asperger, que lleva por nombre Asociación Asperger Concepción, entidad que complementará la labor que localmente realiza la filial de la Asociación de Padres y Amigos de los Autistas, la que cuenta con un curso formado con niños con síndrome de Asperger.

“Esta nueva agrupación surge bajo el alero de la Unidad de Psiquiatría Infantil del Hospital Dr. Guillermo Grant Benavente y responde a un anhelo y necesidad de varios años, que encontró eco y respaldo en la Universidad de Concepción. Iniciativas de este tipo tienen un rol muy importante en la sociedad, ya que, primero que todo, permiten apoyar y contener emocionalmente a las familias que tienen niños con condiciones distintas y, en segundo término, cumplen con la tarea de informar y educar a la comunidad acerca de cómo son estas personas y de qué manera podemos integrarlos”, explicó la doctora Oñate. Un aspecto clave según sostiene la profesional, debido a que “una de las principales razones de la discriminación y de la exclusión de las personas que son distintas a nosotros, es el desconocimiento, el no saber, el no entender. La sociedad tiene que abrir los ojos y darse cuenta que las personas con síndrome de Asperger tienen mucho que aportar”.

“En el síndrome de Asperger hay una diversidad muy grande, por lo tanto los tratamientos y estrategias de manejo conductual deben ser personalizados e individualizados, ya que sólo de esta forma se podrá abordar mejor las falencias, que en cada persona son distintas. La idea es focalizar el trabajo. El manejo conductual en general apunta a fortalecer aquellas áreas que están en déficit, por ejemplo la interacción social, trabajo que si se desarrolla de forma temprana se pueden lograr tremendos avances, en cosas muy simples, como enseñar a los niños a mirar a los ojos cuando hablan o ponerse en el lugar del otro, todo de forma lúdica y entretenida, incorporando musicoterapia, arteterapia, yoga e integración sensorial, intervenciones dirigidas que tienen muy buenos resultados dada la estimulación que generan en sus sentidos”, resumió la doctora Oñate.

De acuerdo a su opinión clínica, la experta ha detectado un aumento enorme en la prevalencia de niños con Asperger. “Se trata de un síndrome que es muy frecuente, pero desconozco las razones de este crecimiento. Uno de los factores que gatilla este cuadro es el genético o hereditario, también hay factores medioambientales. Lo que sí está claro es que estamos frente a un trastorno del neurodesarrollo, es decir, algo pasa durante el desarrollo embrionario, cuando se dan una serie de fenómenos en el sistema nervioso central. En ese instante algo ocurre y genera una alteración en la migración celular, pero qué efectivamente lo provoca es aún materia de estudio”.

Mundo Médico

Destacado Agenda de Eventos

V Simposio IPSA 2025: cinco años de farmacología aplicada

09 Mayo 2025

El quinto simposio del Instituto de Psicofarmacología Aplicada (IPSA) tiene como objetivo acercar los últimos avances en psicofarmacolo...

Destacado Galería Multimedia

Nuevos horizontes en gastroenterología

25 Marzo 2025

 Las "XVII Jornadas de Avances en Gastroenterología" congregaron a destacados especialistas para abordar los últimos avances en enferm...

Riesgos cardiometabólicos en La Serena

20 Enero 2025

Entre el 17 y 18 de enero se llevaron a cabo las primeras Jornadas de Riesgo Cardiometabólico en el Hotel Club La Serena, que reunieron ...