Sexualidad
Obesidad, sumando problemas
Que la obesidad tiene directa relación con las principales enfermedades crónicas de nuestro tiempo como las patologías cardiovasculares, diabetes mellitus tipo 2, la hipertensión arterial y algunos tipos de cáncer no es sorpresa para nadie. Y que en Chile el panorama no es mejor, ya que la obesidad es uno de los principales problemas de salud pública, existiendo más de 200 mil obesos mórbidos que tienen indicación quirúrgica obligatoria, tampoco.
Pero la llamada “globosidad” no sólo tiene esas razones para haberse convertido en la nueva pandemia del siglo XXI. Lo que muchos ignoran es que también tiene importantes efectos negativos en la vida sexual de las personas. Los obesos mórbidos (muy severos), con independencia de sus trastornos orgánicos, pueden sufrir el rechazo de su pareja y con frecuencia ellos mismos manifiestan una baja en la autoestima, lo que agrava cualquier desorden sexual. Esto sucede debido a que los trastornos sexuales son derivados por las enfermedades que complican la obesidad, sobre todo por las limitaciones físicas que provoca como por ejemplo: fatiga fácil, cansancio, dificultad para moverse, ocultamiento y difícil acceso a los órganos genitales. Todo ello influye e impide una adecuada respuesta.
Y precisamente este último punto ha sido confirmado por un reciente estudio publicado en la revista 'British Medical Journal'. “Los médicos deberían tener en cuenta que el exceso de peso puede tener un impacto sobre las relaciones” advierten los investigadores del estudio, integrantes del Instituto francés de la Salud y la Investigación Médica.
Debido al poco estudio que hay sobre la relación entre obesidad y sexualidad, los científicos decidieron llevar a cabo esta innovadora investigación. Para ello, evaluaron a una muestra de 10.170 individuos de edades entre los 18 y los 69 años que vivían en Francia en 2006, a los que sometieron a un completo cuestionario telefónico. En él, averiguaron todo sobre sus características físicas, hábitos y por supuesto, su vida sexual.
Es necesario mencionar que de los participantes, un total de 2.725 hombres y 3.651 mujeres presentaban un peso considerado normal; otros 1.488 hombres y 1.010 mujeres padecían sobrepeso y los restantes 350 hombres y 411 mujeres eran obesos. ¿Qué pasó? Los resultados demostraron que el número de mujeres que había tenido encuentros sexuales en los últimos 12 meses era significativamente más bajo entre las participantes obesas. Además, resultó ser que las mujeres con exceso de peso consideran el sexo como una parte poco importante de su equilibro personal.
En el caso de los varones, los hombres con sobrepeso eran menos propensos que sus compañeros a tener más de una pareja sexual en el último año. Además, los individuos con kilos de más también tenían más posibilidades de desarrollar una disfunción eréctil y llevar a cabo prácticas sexuales poco seguras.
Por otra parte, en el caso de los hombres con sobrepeso, se confirmó que eran menos propensos que sus compañeros a tener más de una pareja sexual en el último año. Es más, los individuos obesos tenían mayores posibilidades de desarrollar una disfunción eréctil y llevar a cabo prácticas sexuales poco seguras.
Embarazo y obesidad
Uno de los datos más llamativos de la investigación es que la tasa de embarazos no deseados era cuatro veces más alta entre las mujeres obesas. En este sentido, estas participantes también eran menos propensas que sus compañeras a utilizar métodos anticonceptivos o a consultar por servicios de contracepción.
Un editorial que acompaña a este trabajo en la revista médica advierte, con todo, de la necesidad de tomar estos datos con cautela antes de extrapolarlos a otras poblaciones. "Si estos resultados se corroboran, necesitamos saber por qué las mujeres obesas usan menos anticonceptivos y tienen más embarazos no deseados pese a tener menos parejas sexuales. Las respuestas a estas preguntas serán probablemente complejas, con aspectos biológicos, psicológicos y sociales que exigen un enfoque de calidad", concluyen.
