Positiva evaluación de programa de cuidados paliativos
Mejorar la calidad de vida de los pacientes y sus familias, a través de la prevención y alivio del sufrimiento, es una tarea prioritaria en el Hospital Clínico Magallanes.
Reconocer, proteger y regular, sin discriminación alguna, el derecho de las personas que padecen una enfermedad terminal o grave a una adecuada atención de salud es el principal objetivo del Programa de Cuidados Paliativos Universales, vigente en Chile desde 2021.
La prevención y alivio de síntomas de la patología por medio de la identificación temprana, adecuada evaluación y tratamiento físico y psicológico son los pilares de la iniciativa, implementada en 2023 en el Hospital Clínico Magallanes.
Integrantes de la Unidad de Alivio del Dolor y Cuidados Paliativos, dependiente del Centro de Responsabilidad Oncológico del recinto asistencial de Punta Arenas, evaluaron positivamente su funcionamiento.
“Las intervenciones paliativas precoces son fundamentales para mejorar los resultados clínicos. El número de pacientes ha crecido y se han incorporado más profesionales al equipo”, comentó la doctora Camila Márquez Ralil, jefa del Programa de Cuidados Paliativos Universales.
Junto a ella, trabajan el doctor Matías Kim, Cecilia Vivallo y Carolina Aguilar (enfermeras), Marcela Ojeda (técnico en enfermería en nivel superior), Katherine Romero (psicóloga) y Romina Toledo (trabajadora social). La capacitación constante, a través de la asistencia a congresos e intercambio de experiencias con miembros de otros centros de salud, ha sido uno de los puntos positivos.
Según explicó la doctora Márquez, la mayoría de los casos se relacionan con enfermedades respiratorias. “Principalmente fibrosis pulmonar y EPOC en estadio terminal. También insuficiencias cardíacas, demencias y cirrosis hepática”.
“Buscamos responder a todas las aristas del sufrimiento, un concepto que en medicina paliativa se llama dolor total. Parte desde lo físico, emocional y psicológico, hasta el sufrimiento social. Nuestro trabajo se orienta a la contención y ayuda desde una perspectiva integral”.
Dentro de las prestaciones que ofrecen se incluyen visitas domiciliares, atención en policlínico, manejo farmacológico, procedimientos de enfermería, apoyo psicológico familiar y talleres para cuidadores.
“Los pacientes activos del programa son en su gran mayoría de alta complejidad. Muchos casos fueron impactantes. Nos hemos enfrentado a experiencias duras, porque inevitablemente se crean vínculos, pero eso ha fortalecido el aprendizaje. También existen aspectos reconfortantes, porque logramos que este proceso sea menos doloroso y se pueda sobrellevar con tranquilidad y de forma más sana para las familias”, finalizó.
