Medicina personalizada como eje de innovación
Implementar este enfoque terapéutico en los sistemas sanitarios es un reto que el Hospital Regional de Concepción enfrenta con una unidad especializada.
El uso masivo de tratamientos individuales contra el cáncer y otros trastornos de origen celular representa un desafío para los sistemas sanitarios. En Latinoamérica la medicina personalizada es un tema emergente y los esfuerzos por desarrollarla suelen verse enfrentados a la falta de regulación, inestabilidad política, infraestructura deficiente, escasa inversión pública y la carga de enfermedades.
Converger avances médicos, tecnológicos, la genómica y ciencia de datos para abordar a los pacientes de forma diferenciada, desde la prevención hasta el tratamiento, promoviendo la expansión de la técnica y garantizando un acceso universal es el objetivo de la Unidad de Terapias Personalizadas del Hospital Clínico Regional Dr. Guillermo Grant Benavente de Concepción.
En 2019 abrió sus puertas -como la primera de sus características en Chile- a los requerimientos de personas que responden de manera distinta a los medicamentos. Su participación en la gestión de la pandemia por SARS-CoV-2 también ha sido relevante, reforzando la necesidad de diseñar e implementar enfoques innovadores.
“Lo que intentamos hacer es un traje a la medida, con el cual el paciente recibe exactamente la dosis de fármaco que necesita. Esto implica mayor eficacia del tratamiento farmacológico, reducción de las probabilidades de toxicidad, menor duración de la terapia y, gran parte de las veces, caída de la estancia hospitalaria”, detalló Salvador Cabrera, doctor en farmacocinética clínica y jefe de la unidad. Su cartera de servicios incluye antibióticos, inmunosupresores oncológicos y anticonvulsivantes, entre otros.
“La idea es ir abarcando cada vez más áreas y especialidades médicas. Comenzamos con antibioticoterapia en paciente crítico, que es donde se ha visto mayor impacto por la disminución de días cama, especialmente importante en la contingencia COVID-19, donde lo que se necesita es favorecer la rotación”.
De acuerdo con el químico farmacéutico, “la incorporación de cualquier medicamento en nuestra cartera es resultado de una investigación en alianza con la Universidad de Concepción. Una vez finalizado cada estudio piloto es posible individualizar las dosis de ese fármaco en la práctica clínica habitual”.
