Dr. Edgardo Corral edita libro sobre Pablo Neruda
El texto del destacado gineco obstetra del Hospital Regional de Rancagua aborda la relación temporal y cronológica que mantuvo el poeta con Francia.
El doctor Edgardo Corral Sereño, jefe del Servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital Regional Bernardo O’Higgins de Rancagua, es un nerudólogo aficionado hace años y cuenta con una importante colección de libros y documentos originales del poeta.
En 2015, “me visitó una colega y amiga que reside en Francia desde hace años junto a su cuñado, el alcalde de Saint Avertin, un pequeño pueblo distante a 100 kilómetros de París. Durante su visita le llamó la atención mi declarado interés por la vida y obra del Nobel, lo que se tradujo en una invitación para el siguiente año a inaugurar una calle de su pueblo con el nombre de Pablo Neruda”, relató el doctor Corral.
“Cuando recibí la invitación, decidí redactar una carta de agradecimiento, pero ésta se fue extendiendo más de lo recomendado y luego de varias decenas de páginas se comenzó a transformar en un opúsculo”.
“Llegado el momento del fin –y antes de editarlo- lo sometí al examen del más importante biógrafo de Neruda, el profesor Hernán Loyola Guerra, quien no sin antes sacarme de varios errores y múltiples correcciones, me sugirió orientar todo el texto exclusivamente hacia la relación que había tenido Neruda con el país galo. Y así, después de casi un año de trabajo nació este pequeño libro”.
El texto, “Neruda y Francia”, que resume parcialmente la relación histórica del poeta en ese país, fue lanzado oficialmente hace pocas semanas en La Chascona, con el apoyo de la Fundación Pablo Neruda y de Pedro Pablo Guerrero, un importante crítico literario y columnista de El Mercurio. En esa oportunidad, el doctor Corral realizó un resumen de su trabajo y compartió con los presentes aspectos desconocidos de Neruda, que –dicho sea de paso- el profesional conoció personalmente en una visita que hizo a su Liceo por los años setenta.
“La lectura y los viajes me fueron confirmando que Pablo Neruda era el chileno más universal que teníamos, pues era conocido y traducido en todas partes del mundo, no sólo por su importante aporte a la literatura en idioma español, sino también por su amplia y variada participación en los movimientos renovadores de la época como figura política y cultural”, señaló el doctor Corral.
En las primeras páginas habla del interés inicial del joven Neftalí Reyes por los clásicos poetas franceses, cuando era estudiante secundario en Temuco y también de su llegada a Santiago como alumno de pedagogía en francés en la Universidad de Chile.
“Luego reseña su fugaz pasaje por París y Marsella y de sus lecturas de Marcel Proust cuando va rumbo a su primer cargo consular a Birmania. De sus “furias y sus penas” por Eva Frajeville, la francesita esposa de Carpentier que le inspiró ese largo poema; de sus ediciones clandestinas en el pueblito de Reanville cercano a París para reunir fondos destinados a los republicanos de la guerra civil española; de su función como encargado de la inmigración de españoles desde el puerto francés de Trompelup-Paulliac; y, finalmente, de su reaparición en la capital gala luego de sus años de clandestinidad y de su participación como embajador de Chile en Francia cuando recibió el Nobel”.
“Para mí este trabajo es un aporte y una pasión que combino con mi ejercicio médico, como parte del existir en armonía. Espero que esté pronto en librerías para que todos los interesados en Neruda puedan apreciarlo. Está escrito en lenguaje simple y con apoyo de fotografías, muchas de las cuales son personales”, finalizó el autor.

Dr. Edgardo Corral Sereño