En Viña del Mar:
Anticoncepción de vanguardia reúne a especialistas
Ginecólogos y matronas de la Región de Valparaíso conocieron las características, funcionalidad, bondades y ventajas del anillo vaginal.
Una de las grandes innovaciones en materia anticonceptiva ha sido la incorporación del anillo vaginal, un método hormonal de larga duración que libera hormonas femeninas idénticas a la píldora anticonceptiva –etonogestrel y etinilestradiol- en dosis bajas y constantes y que, absorbidas por la mucosa de la vagina, impiden la ovulación.
Para conversar sobre “Anillo vaginal: cómo lo hacemos en la práctica diaria”, el ginecólogo Jorge Varela Pérez, médico tratante de la Unidad de Alto Riego Obstétrico (ARO) del Servicio de Ginecología del Hospital Carlos van Buren y ex docente de la Universidad de Valparaíso, se reunió con más de 30 profesionales, entre médicos y matronas en el Centro SAVAL de Cooperación Científica de Viña del Mar.
La actividad tuvo como objetivo principal “entregar información sobre la facilidad y aceptabilidad de la vía vaginal como método anticonceptivo, es decir, sobre la existencia de otra vía de administración de hormonas diferente a la oral”, destacó el expositor.
“Quisimos presentar al anillo vaginal como la evolución natural en la anticoncepción, algo que –a futuro- significará que las píldoras –quizás- ya no van a existir, porque a raíz de esta tecnología se van a generar nuevos métodos anticonceptivos”.
“En la práctica diaria, los ginecólogos utilizamos el canal vaginal para la administración de medicamentos antimicóticos, anti trichomonas o algunos acidificantes. Se pensaba que su capacidad llegaba hasta ahí, pero la densa red vascular de la vagina la convierte en una excelente ruta para el paso de algunos medicamentos a la circulación. Así nacieron, en la década de los 80’, los primeros métodos anticonceptivos experimentales y hace 15 años comenzó la fabricación y comercialización del anillo, que ha revolucionado no sólo la industria, sino que también la vida de las mujeres”, enfatizó el académico.
A juicio del especialista, el principal beneficio de esta tecnología es que “la mujer se acuerda una sola vez en el mes de instalar el anillo. Posee una eficacia que no tiene nada que envidiarle a las pastillas clásicas, incluso es mucho mejor porque uno puede bajar la dosis del producto que, secundariamente, puede ser patológico para la mujer. Y, además, se asegura la ausencia de spoting”.
Sobre las preferencias femeninas a la hora de inclinarse por este método, el doctor Varela recalca que “las mujeres que se olvidan de tomar su anticonceptivo diariamente son las primeras en darse cuenta que el anillo es para ellas. Es un método bien tolerado y discreto, que va a liberar a las mujeres de la pastilla”.
Al finalizar la charla, el ginecólogo contestó las preguntas de la audiencia que aportaron al conocimiento de los asistentes, quienes valoraron profundamente saber más respecto de sus características, funcionalidad, bondades y ventajas por sobre otros métodos.

Dr. Jorge Varela, Srta. Javiera Guzmán y Sra. Cristina Vargas