Dr. Beltrán Mena visita a alumnos de medicina UCN
Como una manera de evaluar los conocimientos adquiridos durante los siete años de carrera, desde diciembre de 2003 se viene realizando anualmente el Examen Médico Nacional (EMN).
A esta prueba escrita se someten voluntariamente los egresados de 16 escuelas de medicina chilenas, que pertenecen o no a la Asociación de Facultades de Medicina de Chile (Asofamech), porque es la única herramienta objetiva con que se cuenta para que cada universidad conozca el nivel de conocimiento que tienen sus alumnos.
Por primera vez, el 16 de diciembre próximo, participarán los futuros egresados de la carrera de la Universidad Católica del Norte (UCN). Hecho que tiene un doble significado, pues este test servirá también para la acreditación de Medicina, en vista de la seriedad del proyecto académico.
Ante la ansiedad, dudas y mitos generados en torno al tema, el doctor Beltrán Mena, director del EMN, se reunió con los alumnos con el fin de tranquilizar y despejar todas las inquietudes de los estudiantes.
El docente está consciente que el examen representa “una situación bastante estresante para los alumnos de medicina cuando egresan”. Por ello, ha sostenido sucesivas reuniones con alumnos de diversas escuelas de medicina. “La idea es que los jóvenes hagan todas las preguntas del caso y aclararen sus dudas a este respecto”, señaló.
La prueba consiste en 180 preguntas, las cuales abarcan siete materias: medicina interna; cirugía; pediatría; gineco-obstetricia; psiquiatría; aspectos administrativos de salud y especialidades, donde se miden conocimientos relacionados con oftalmología, otorrinolaringología y dermatología.
Las evaluaciones se realizan de acuerdo al número de respuestas correctas, equivalentes a un porcentaje de rendimiento, que va de 1 a 100. Pese a que la prueba mide conocimientos, los estudiantes que la realizan no arriesgan la reprobación, puesto que el EMN no contempla ni el fracaso ni el éxito. Sólo se registran puntajes, datos que –posteriormente- son entregados de forma confidencial a las escuelas y a cada uno de los estudiantes.
Si bien la labor del médico abarca los conocimientos aprendidos, las habilidades y las aptitudes, el EMN sólo mide la primera de ellas, lo que es entendible, puesto que los otros dos ítems son mucho más difíciles de cuantificar.
Desde abril de 2009 entró en vigencia la Ley 20.261, que transforma el Examen Médico Nacional en el Examen Único Nacional de Conocimientos Médicos, el cual será obligatorio para que un médico chileno o extranjero pueda postular a algún cargo público o municipal, con lo que se deja atrás al proceso de revalidación de título profesional utilizado anteriormente. Esto demuestra la solidez e importancia que esta prueba ha alcanzado en los últimos años dentro de la comunidad médica nacional.
