Dr. Patricio Varela Balbontín:
“Las técnicas de Nuss y Abramson representan una revolución en cirugía”
Al doctor Patricio Varela, cirujano pediatra de Clínica Las Condes y Hospital Luis Calvo Mackenna, le gusta mucho esquiar y pasar el mayor tiempo posible con su familia, pero también le encanta sanar niños que acuden a él buscando su ayuda y conocimiento. Para este profesional es muy estimulante el hecho de que el paciente pediátrico tenga una buena recuperación, ya que puede hacer vivir hasta 80 años a alguien que, por ejemplo, tuvo riesgo vital al nacer. Además, cuenta que le parece muy interesante que exista mayor variedad de patologías en el niño que en el adulto. “Cada niño en su edad tiene una patología muy característica que se transforma en un desafío muy grande. Eso es lo más atractivo de la cirugía pediátrica”, comenta.
Varela es reconocido por ser el único médico en Chile que realiza la operación de pectus carinatum o pecho de paloma con la técnica llamada Abramson, una versión invertida de la técnica de Nuss. Ésta última fue inventada con anterioridad y se utiliza para tratar el pectus excavatum o pecho hundido. El doctor Patricio Varela, muy amigo del propio doctor Nuss, también enseña y opera con este método, el cual considera es totalmente revolucionario. “Es una cirugía que cambió radicalmente el tratamiento de una enfermedad. De procedimientos muy radicales pasamos a uno mínimamente invasivo…realmente es una revolución en la técnica”, comenta el profesional. Así, en una entrevista con SAVALnet, el médico nos detalla la operación y relata su experiencia en el extranjero.
¿En qué consiste la operación de pectus excavatum?
Es muy sencilla. Consiste en colocar una barra metálica, que es curva, por los costados y a través de una incisión de una pulgada se introduce una barra metálica que pasa detrás del esternón y como éste está hundido, la barra empuja el esternón hacia delante. Es como desabollar un auto. Y la corrección es inmediata. Eso es muy rápido, 10 minutos. El resto de la cirugía consiste en fijar esta barra, que no se mueva. Y todo eso se hace mirando dentro del tórax con una cámara de 5 milímetros, que te permite ver el corazón, los pulmones, los vasos, todos. Por lo tanto es una técnica muy segura porque estás mirando de forma muy clara y de esa manera puedes guiar la barra sin hacer daño.
¿Cuáles son sus riegos?
Riesgos como todas las cirugías. Pero si tienes buen instrumental, buen equipamiento, infraestructura y ves bien no tienes por qué tener un problema. Ahora, si no cuentas con eso puede ser un arma de doble filo. Y tener complicaciones graves por el hecho de hacer la cirugía de una forma que no corresponde.
¿Cuáles han sido los resultados post operación?
Han sido muy buenos. Hay distintos resultados publicados en la literatura. Algunos hablan de un éxito de 95% lo cual es muy bueno en medicina. Otros hablan de 80%, lo que quiere decir que hay un 20% que no anda muy bien, pero tienes otras alternativas para esos pacientes. Hoy en día la gran mayoría de los pacientes que tienen una deformación de este tipo, se benefician de esta técnica.
La técnica de Nuss fue notificada en 1997. ¿Cómo trataban esta enfermedad anteriormente?
Antes se usaban técnicas que datan de muchos años. Consisten en sacar todo lo que está mal formado, lo hundido. Se sacan cartílagos, se corta el esternón, se hacen incisiones visibles, es muy invasiva y radical. En cambio esta técnica no requiere cortar cartílagos, no requiere cortar esternón, se hace drenaje y no deja incisiones visibles. Lo que sí se deja es un metal en el tórax, que después se retira.
¿Quiénes consultan más por esta enfermedad, hombres o mujeres?
Las malformaciones toráxicas en general son más frecuentes en los hombres. Las cifras son 4 a 1, por lo tanto tengo muchos más hombres operados. Sin embargo, cada día veo a más mujeres. Quizás la mujer consulta menos, porque al tener un desarrollo mamario eso disimula un poco el problema. En cambio el hombre cualquier hundimiento que tenga en el tórax es muy visible, porque anda con el tórax descubierto. Es más frecuente en los hombres, pero quizás no tanto más de lo que se cree.
¿La técnica de Nuss también se utiliza para la operación de Pectus Carinatum?
El origen de la enfermedad es la misma que en el excavatum. Es una enfermedad a los cartílagos, que empujan el esternón hacia adelante o hacia atrás. Hay una técnica que es muy novedosa, que tiene cerca de 2 años y la inventó un argentino a raíz de la técnica de Nuss. Éste último coloca una barra por detrás y al argentino se le ocurrió poner la barra por delante y empujar hacia atrás. Entonces esa técnica se llama de Abramson que es el nombre del cirujano argentino de Buenos Aires. También se denomina reverse Nuss, es decir, Nuss al revés. El mismo año en que él la dio a conocer yo también la empecé a hacer acá en Chile y otros países como Italia. Creo que es una técnica muy atractiva, muy novedosa, que beneficia también a muchos pacientes.
El año pasado usted fue invitado a EEUU por el propio doctor Nuss para enseñarles a sus colegas precisamente sobre esta nueva técnica para el pectus carinatum. ¿Cómo fue esa experiencia y qué se siente que un médico chileno vaya a enseñarles a doctores norteamericanos?
Para mí siempre es entretenido eso, me gusta y fue una experiencia muy grata la de Estados Unidos. Conciente de que estaba con una responsabilidad muy grande, porque que me invitaron a USA a realizar una cirugía que nunca se había hecho antes, entonces también es muy importante para ellos. Fue muy gratificante, un orgullo y desafío tremendo. Por suerte anduvo todo muy bien. Lo valoro mucho, porque a veces te pueden invitar a presenciar una cirugía por primera vez y eso ya es una situación de privilegio. Entonces que más encima la hagas tú y en Estados Unidos, es inédito. Además, lo que más me enorgullece es que fue el mismo doctor Nuss quien me invitó, no cualquier persona. Él es mundialmente conocido, eso le da un peso mayor todavía.
¿Cómo es considerada la cirugía pediátrica chilena en el exterior?
A nivel latinoamericano sin duda estamos en la parte más alta junto con los argentinos. La cirugía pediátrica chilena está a muy buen nivel gracias al desarrollo alcanzado en hospitales pediátricos como el Calvo Mackenna y otros. Este hospital ha sido pionero en muchas áreas, es un centro de mucha derivación, de alta complejidad y de alta resolución. O sea, todo lo que llega al Calvo Mackenna se resuelve. Y tenemos un estándar muy bueno gracias a mucha ayuda de fundaciones y de privados, no solamente aportes del estado. Eso nos permite hacer cirugías de alto nivel. Acá en Clínica Las Condes también hay una tecnología que es del nivel de la medicina americana, donde podemos hacer cirugías de alto vuelo y contar con todos los recursos necesarios para hacerlas. Así que estamos muy bien posicionados. De hecho, tenemos muchos médicos extranjeros de Brasil, Ecuador, Guatemala, Venezuela, Honduras e incluso de Italia que continuamente están entrenándose con nosotros.
