Dr. Bernhard Westerberg Maldonado:
“El desarrollo de la medicina se basa en dos temas: la tecnología y la prevención”
Debido a la importancia que tienen las patologías cardiacas y cerebrovasculares como principal causa de muerte en la población chilena, fue inaugurada en el Hospital Regional de Antofagasta una moderna Unidad de Hemodinamia, que permitirá evitar un porcentaje importante de muertes gracias al diagnóstico y tratamiento oportuno.
El doctor Bernhard Westerberg Maldonado, médico ecuatoriano residente en Chile hace más de 11 años, es el especialista en hemodinamia y encargado de la nueva unidad que empezó a funcionar este año.
“Me vine a Chile en pos de perfeccionamiento de mi carrera como médico y al final de la misma recibí la oportunidad de quedarme en el Servicio Público de Chile, primero en Viña del Mar y ahora en Antofagasta donde me desempeño bajo el mismo lema trabajando por el sistema público”, confesó.
La especialidad de cardiología la realizó en la Universidad de Valparaíso y se inclinó por ella, porque antes de ser médico quería ser cardiólogo “así que realicé mi sueño”.
Esperando la apertura de la Unidad Coronaria del Hospital de Antofagasta, se muestra entusiasta con los logros alcanzados en estos pocos meses. Es importante recordar que “la Unidad de Hemodinamia la inauguramos el 31 de julio cuando hicimos la primera coronariografía en el sistema público del norte de Chile y la primera angioplastía el 2 de agosto”, señaló.
El doctor Westerberg conversó con SAVALnet desde la nueva unidad sobre los procedimientos diagnósticos y terapéuticos que se podrán realizar para el tratamiento de los pacientes con enfermedades cardiovasculares de la II Región y sus alrededores.
- Hace un par de meses se inauguró la Unidad de Hemodinamia del Hospital Regional de Antofagasta, con un nuevo equipo de tecnología avanzada. Nos podría comentar ¿cuáles son las características físicas y tecnológicas del recinto?
- Desde el punto de vista físico, contamos con una planta amplia muy adecuada para las labores de una Unidad de Hemodinamia de alta complejidad, con unos servicios para clínicos del hospital también fuertemente enlazados con la misma. Desde el punto de vista geográfico, tenemos un equipo de última generación que permite una resolución de imagen de alta calidad y, además, una exposición mínima de radiación para el personal y los pacientes, por lo que es posible obtener excelentes resultados con poco riesgo. Por otra parte, el personal humano ha sido convenientemente preparado antes de inaugurar la unidad, la que entró en funcionamiento el 31 de julio de este año cuando hicimos la primera coronariografía en el sistema público del norte de Chile y la primera angioplastía el 2 de agosto.
- El hecho de contar con la primera Unidad de Hemodinamia del sector público en la región, tiene algún significado especial
- Por supuesto, desde Viña del Mar hacia el norte del país no existía ninguna otra unidad en el sistema público. Había solamente dos en el sistema privado para todo el porcentaje de población que reside en Chile. Por lo tanto, sabiendo la prevalencia alta que tiene la patología vascular en esta zona, era lo más adecuado que –en especial Antofagasta- contara con un servicio de primera.
- ¿Cuál es la prevalencia de las patologías cardiovasculares en la zona?
- Es alta. Cuando trabajaba en Viña del Mar, nosotros recibíamos una cantidad importante de pacientes de Antofagasta y no éramos el único centro de derivación, porque la cantidad de enfermos era realmente alta, cosa que vine a comprobar cuando me trasladé a trabajar al Hospital Regional de Antofagasta, donde veo como todos los días ingresan pacientes con síndromes coronarios agudos lo que ratifica las estadísticas conocidas en la zona.
- En los últimos años la hemodinamia ha desarrollado la parte terapéutica de la enfermedad coronaria y valvular, permitiendo a muchos pacientes no pasar por correcciones quirúrgicas de corazón abierto, sino hacerlo con técnicas ambulatorias. ¿Cómo se lleva a cabo este proceso?
- Cada vez más se va asentando esta técnica que, pese a que ya tiene 30 años, sigue creciendo y avanzando a grandes pasos gracias a los adelantos tecnológicos, con lo cual ha logrado posicionarse como un arma de primera línea para la resolución de la patología coronaria. Sabemos, además, que hay un grupo muy importante de pacientes que, de todas maneras, requiere de un manejo médico adecuado o de una intervención quirúrgica.
- Cuando no se contaba con esta Unidad, cómo se trataba a los pacientes. ¿Realizaban cirugías a corazón abierto o eran derivados a otros centros?
- Históricamente dentro de la región, la Clínica Antofagasta ha sido la que ha prestado la mayor cantidad de respaldo al sistema público al no contar el mismo con la resolución angiográfica. Además, un grupo no menor de pacientes, dado el alto porcentaje de la patología, inclusive que la misma clínica no lograba absorber, eran derivados a centros de Viña del Mar y Santiago.
- Con la adquisición del angiógrafo de última generación, el Hospital se ha convertido en un centro de referencia para la zona norte del país, absorbiendo la demanda insatisfecha en el área cardiológica. ¿A cuántas personas se espera dar atención?
- Nosotros haciendo cálculos matemáticos, con nuestro personal, con la capacidad que tiene el hospital y con la población que tenemos nosotros asignada sabiendo la prevalencia que tiene la enfermedad coronaria estimamos que deben ser aproximadamente unos 600 procedimientos exclusivamente para la II Región anuales y posiblemente otro número importante cuando podamos extender nuestros servicios a las regiones vecinas.
- ¿Cuáles son las ventajas que tiene para el paciente, el contar con una Unidad como esta en su región?
- En este momento lo más importante es el acceso que está directamente unido a la alta calidad de los equipos y del personal que está funcionando. A nivel de la misma unidad se garantiza un excelente resultado, el que es comparable con cualquier otro sistema previamente montado.
- A su juicio, hacia dónde se debe orientar el desarrollo de la medicina en su región. ¿Hacia el tema tecnológico o hacia la prevención?
- Las dos cosas son igual de importantes. O sea, el tema de prevención es un tema prioritario en cualquier sistema de salud, pero uno tiene que asumir que los gruesos resultados no los vamos a ver en mucho tiempo y no estamos en condiciones de abandonar lo que tenemos actualmente, por eso necesitamos apuntalar la alta tecnología y la alta complejidad para resolver enfermedades complejas.
