Un aspecto crítico de la salud global en el siglo XXI es la resistencia a los antimicrobianos (RAM). En 2019, se cuantificó su carga a nivel mundial y regional, con estimaciones detalladas por país; sin embargo, aún no hay estudios que ofrezcan una visión integral que incluya tendencias históricas y proyecciones futuras.

Un extenso equipo de investigadores de varios países estimó las muertes asociadas a la RAM bacteriana. El estudio abarcó 22 patógenos, 84 combinaciones de patógenos y antibióticos, y 11 síndromes infecciosos en 204 países y territorios, entre 1990 y 2021.

Se analizaron datos de múltiples fuentes sobre muertes y hospitalizaciones, abarcando 520 millones de registros, para estimar la carga global de la RAM. La cual se proyectó hasta 2050 en tres escenarios: el futuro más probable, el desarrollo de nuevos medicamentos para patógenos gramnegativos y mejoras en la calidad de la atención sanitaria.

En 2021, se estimó que 4,71 millones de muertes estaban asociadas con la RAM bacteriana. Las tendencias en la mortalidad por RAM desde 1990 mostraron una disminución de más del 50% en niños menores de 5 años, pero un aumento de más del 80% en adultos desde los 70 años. La mortalidad por RAM disminuyó en los menores de 5 años, pero aumentó desde esa edad en adelante en todas las regiones. El Staphylococcus aureus resistente a la meticilina mostró el mayor incremento a nivel mundial, y entre las bacterias gramnegativas, la resistencia a los carbapenémicos pasó de 619.000 muertes en 1990 a 1,03 millones en 2021. Se estima que para 2050, las muertes asociadas con la RAM podrían alcanzar 8,22 millones, siendo el sur de Asia y América Latina y el Caribe las regiones más afectadas. Los mayores aumentos de muertes se observarán en personas de 70 años o más. 

En un escenario de mejor atención, se podrían prevenir 92 millones de muertes entre 2025 y 2050 mediante un manejo adecuado de infecciones graves y acceso a antibióticos. En un escenario de desarrollo de medicamentos específicos para patógenos gramnegativos, se podrían evitar 11,1 millones de muertes.

Estos hallazgos destacan la importancia de la prevención de infecciones, evidenciada por la disminución de muertes por RAM en menores de 5 años, y alertan sobre el aumento preocupante de la carga de RAM en mayores de 70 años. Dada la variabilidad de la RAM según la ubicación y la edad, es crucial implementar intervenciones que combinen la vacunación, la reducción del uso inadecuado de antibióticos tanto en la agricultura como en humanos y la investigación de nuevos antibióticos, con el fin de mitigar las proyecciones de muertes por RAM para 2050.