Inhibición de la tirosina quinasa de Bruton protege contra la anafilaxia
El uso de acalabrutinib podría ser el primer tratamiento conocido para prevenir una reacción anafiláctica en humanos.
Ninguna terapia conocida puede prevenir la anafilaxia. La tirosina quinasa de Bruton (BTK, por sus siglas en inglés) es una enzima esencial para la señalización del receptor de IgE de alta afinidad (FcεRI) en células humanas.
En este estudio liderado por Bruce S. Bochner del Departamento de Medicina, División de Alergia e Inmunología de la Universidad de Northwestern, Estados Unidos, se evaluó si inhibidores de BTK aprobados por la FDA (BTK-Is) podrían evitar las respuestas mediadas por IgE, incluida la anafilaxia.
Se demostró que la inhibición irreversible con BTK-Is previno ampliamente la desgranulación mediada por IgE y la producción de citocinas en mastocitos humanos primarios, además bloqueó la contracción inducida por alérgenos en tejidos de bronquios humanos aislados.
Adicionalmente, y para abordar su eficacia “in vivo”, los investigadores crearon un nuevo modelo de anafilaxia en un ratón humanizado (NSG-SGM3) que no requiere ablación de la médula ósea ni implantación de tejido humano. Después de una única inyección intravenosa de células CD34+ humanas, los animales NSG-SGM3 mostraron excelentes respuestas durante la anafilaxia sistémica pasiva usando IgE humana para evocar selectivamente la activación de mastocitos y basófilos humanos, y la gravedad de la respuesta fue controlable mediante la alteración de la cantidad de alérgeno utilizado para la exposición.
Sorprendentemente, la utilización de dos dosis orales del inhibidor de BTK acalabrutinib, previno completamente la anafilaxia mediada por IgE en estos ratones y también protegió significativamente contra la muerte durante la anafilaxia severa.
En conclusión, este estudio sugiere que BTKis puede prevenir la anafilaxia en humanos inhibiendo la señalización mediada por el receptor FcεRI.
