JAMA
El microbioma redefine la estrategia oncológica
Este influye en la respuesta inmunitaria, principalmente en el intestino, y la eficacia de intervenciones como la inmunoterapia, resaltando la importancia de desarrollar tratamientos personalizados, seguros y óptimos.
La creciente evidencia científica resalta el papel crucial del microbioma, especialmente el gastrointestinal, en la modulación de diversas patologías, incluyendo el desarrollo y progresión del cáncer. La microbiota, conformada por bacterias, virus, hongos y arqueas, influye en la inmunidad sistémica, el metabolismo y la integridad de la barrera mucosa, factores determinantes en la respuesta al tratamiento oncológico y la aparición de efectos adversos. Por lo tanto, la manipulación del microbioma emerge como una estrategia prometedora para mejorar los resultados en pacientes con cáncer.
Este estudio de revisión traslacional, liderado por la Dra. Jennifer Wargo de la Universidad de Texas, EE. UU., tuvo como objetivo sintetizar la evidencia actual sobre la influencia del microbioma en el cáncer, incluyendo cómo la microbiota en el intestino y otros sitios anatómicos afecta el curso de esta enfermedad.
Se realizó una revisión exhaustiva de la literatura clínica y preclínica existente sobre el microbioma y el cáncer. Los estudios incluidos abarcaron investigaciones en modelos in vitro e in vivo, análisis de cohortes de pacientes tratados con diferentes enfoques oncológicos (inmunoterapia, quimioterapia, trasplante de células madre, entre otros) y ensayos clínicos exploratorios de intervenciones dirigidas a modular la microbiota (trasplante de microbiota fecal, dietas específicas, etc.).
La evidencia revisada reveló que la composición y diversidad del microbioma gastrointestinal pueden influir en la carcinogénesis, el desarrollo de metástasis, la respuesta a tratamientos oncológicos y la incidencia de efectos adversos asociados. Especies bacterianas específicas, como Bifidobacterium y Akkermansia muciniphila, están relacionadas con una mejor respuesta a la inmunoterapia, mientras que otras, como Enterobacteriaceae y algunas bacterias orales, pueden inhibirla. Además, la alteración del microbioma por antibióticos se vinculó con una menor supervivencia general en pacientes tratados con inmunoterapia.
El trasplante de microbiota fecal y las intervenciones dietéticas mostraron resultados prometedores para modular el microbioma y mejorar los resultados clínicos en ciertos contextos.
En resumen, el microbioma intestinal y el de otras partes del cuerpo son factores clave en el desarrollo, progresión y respuesta al tratamiento del cáncer. Las terapias dirigidas a modular la microbiota podrían optimizar los resultados en pacientes oncológicos. No obstante, se requiere investigación adicional para comprender mejor los mecanismos involucrados, identificar biomarcadores predictivos y desarrollar estrategias de modulación del microbioma seguras y eficaces.
Fuente bibliográfica
The Microbiome and Cancer: A Translational Science Review
Fernandez E, Wargo JA, Helmink BA
DOI: 10.1001/jama.2025.2191
