Calcificaciones mamográficas aumentan el riesgo de cáncer de mama avanzado
La presencia de depósitos de calcio se asocia con un incremento general en la probabilidad de desarrollo y progresión de la enfermedad, siendo especialmente significativo en mujeres con mamas densas y peso elevado.
El cáncer de mama continúa siendo un desafío importante para la salud pública, por lo que la detección precoz y la identificación precisa del riesgo son esenciales para mejorar los resultados clínicos. Aunque las calcificaciones mamográficas observadas en informes negativos o benignos se vinculan con un aumento en la probabilidad de desarrollar la patología, aún no está claro si también están relacionadas con un mayor riesgo de cáncer en etapas avanzadas.
La investigadora Karla Kerlikowske, del Departamento de Medicina y Epidemiología de la Universidad de California en San Francisco, EE. UU., y su equipo evaluaron si las calcificaciones registradas en los informes de mamografías se asocian con un mayor riesgo de cáncer de mama invasivo avanzado.
Se realizó un estudio retrospectivo con datos del Consorcio de Vigilancia del Cáncer de Mama (BCSC, por sus siglas en inglés), que incluyó 3.710.313 mamografías de cribado con evaluaciones finales negativas/benignas, realizadas en 991.991 mujeres de entre 40 y 74 años.
Se estimó el riesgo acumulado a 5 años de desarrollar cáncer de mama avanzado (etapa pronóstica ≥ II), ajustando los resultados según factores como la presencia o ausencia de calcificaciones, el estado menopáusico, la densidad mamaria (densa o no densa) y el índice de masa corporal (IMC), considerando los umbrales de <25 kg/m² y ≥25 kg/m².
La prevalencia de calcificaciones fue del 6,1% en las mujeres que desarrollaron cáncer de mama avanzado, frente al 3,6% en quienes no lo hicieron. Las asociaciones generales entre calcificaciones y cáncer avanzado se observaron de manera similar en mujeres premenopáusicas (HR=1,4; IC 95%: 1,1-1,9) y posmenopáusicas (HR=1,5; IC 95%: 1,2-1,7).
En comparación con las mujeres posmenopáusicas con mamas no densas, IMC <25 kg/m² y sin calcificaciones (incidencia acumulativa a 5 años de cáncer avanzado = 1,6 por 1.000 mujeres), las posmenopáusicas con mamas densas, IMC ≥25 kg/m² y calcificaciones tuvieron un riesgo 5,5 veces mayor de cáncer avanzado (incidencia acumulativa a 5 años de cáncer avanzado = 10,2 por 1.000 mujeres). Los resultados fueron similares para las premenopáusicas.
Estos hallazgos revelan que las calcificaciones mamográficas aumentan el riesgo de desarrollar cáncer de mama avanzado, incluso más allá de la presencia de mamas densas y el sobrepeso u obesidad. Es importante investigar la solidez de estas asociaciones en función del tipo de calcificación y considerar la inclusión de calcificaciones en modelos avanzados de riesgo de cáncer para mejorar la precisión de estas evaluaciones.
Fuente bibliográfica
Mammographic calcifcations association with risk of advanced breast cancer
Kerlikowske K, et al.
https://doi.org/10.1007/s10549-025-07753-z
