Cardiología
Ácido fólico y vitamina B no previenen acontecimientos cardiovasculares
Numerosos estudios sugieren que la homocisteína puede ser un factor de riesgo modificable para la enfermedad cardiovascular. En investigaciones experimentales, el aminoácido causa estrés oxidativo, daño en el endotelio además de incrementar la trombogenicidad. En general, los estudios epidemiológicos han demostrado una asociación independiente y positiva entre los niveles de homocisteína y el riesgo cardiovascular. Los datos sugieren que incluso las elevaciones suaves o moderadas del aminoácido aumentan el riesgo cardiovascular; esta observación es importante, porque tales incrementos son comunes y se pueden corregir fácilmente mediante terapias seguras y económicas. El ácido fólico es el determinante dietético más importante de la homocisteína; la suplementación diaria con 0.5 a 5.0mg baja los niveles de la homocisteína plasmática en un 25 por ciento. En tanto, la ingesta de vitamina B12 en a lo menos 0.4mg diarios disminuye las concentraciones en un 7%, y los suplementos de vitamina B6 pueden ser particularmente importantes en bajar la homocisteína después de la post-carga de metionina.
La doctora Eva Lonn (División de Cardiología, Universidad de MacMaster, Ontario, Canadá) y colaboradores, asignaron aleatoriamente a 5.522 pacientes mayores de 55 años de edad con enfermedad vascular o diabetes a recibir tratamiento diario con una combinación de 2,5 mg de ácido fólico, 50 mg de vitamina B6 y 1 mg de vitamina B12 o a placebo durante una media de cinco años. El principal criterio de valoración fue una combinación de muerte por causas cardiovasculares, infarto de miocardio y accidente cerebrovascular.
Los niveles medios de homocisteína plasmática se redujeron en 2,4 µmol por litro (0,3 mg por litro) en el grupo de tratamiento y aumentaron en 0,8 µmol por litro (0,1 mg por litro) en el grupo placebo. Los acontecimientos evaluados se produjeron en 519 pacientes (18,8%) asignados a la terapia activa y en 547 pacientes (19,8%) asignados a placebo (riesgo relativo: 0,95; intervalo de confianza del 95%: 0,84 a 1,07; P = 0,41). En comparación con el grupo control, la intervención no redujo de forma significativa el riesgo de muerte por causas cardiovasculares (riesgo relativo: 0,96; IC del 95%: 0,81 a 1,13), de infarto de miocardio (riesgo relativo: 0,98; IC del 95%: 0,85 a 1,14) ni de ningún criterio secundario de valoración. Menos pacientes asignados al tratamiento activo en comparación con placebo tuvieron un accidente cerebrovascular (riesgo relativo: 0,75; IC del 95%: 0,59 a 0,97). Más individuos del grupo de tratamiento activo fueron hospitalizados por angina inestable (riesgo relativo: 1,24; intervalo de confianza del 95%: 1,04 a 1,49).
En conclusión, para los autores de la investigación, los suplementos combinados de ácido fólico y vitaminas B6 y B12 no fueron capaces de reducir el peligro de sufrir acontecimientos cardiovasculares importantes en los pacientes con enfermedad vascular.
Fuente bibliográfica
N Engl J Med. 2006 Apr 13;354(15):1567-77