Reumatología
Los hombres que consumen alcohol y particularmente cerveza tienen mayores posibilidades de padecer gota
La gota es la condición más común de la artritis inflamatoria en los hombres. La asociación entre un alto consumo de alcohol y el riesgo creciente de gota se sospecha desde hace tiempo; sin embargo, esta relación no ha sido confirmada. Estudios de corte metabólico han demostrado que la hiperuricemia (no la gota por sí misma) podría ser inducida por el consumo de alcohol, además, la hiperuricemia se ha propuesto como marcador de la ingesta de etanol, estos resultados han proporcionado la base de que el alcohol eventualmente podría causar gota a través de la hiperuricemia. Conclusiones de varios estudios casos-control y de cohorte, han demostrado una significativa asociación, pero si bien éstos pudieron comprobar de forma retrospectiva la consumición de alcohol, no ajustaron las potenciales desviaciones a excepción de la edad. Tampoco los análisis prospectivos han podido confirmar tal asociación ya que han sido limitados debido a los pequeños tamaños muestrales utilizados y a la falta de variables relevantes.
Por otra parte, el riesgo de gota podría concebiblemente variar dependiendo del tipo de bebida alcohólica (ej, cerveza, vino y otros alcoholes), al igual que el riesgo para otras enfermedades, pero no hay datos disponibles. También se ha sugerido que el alto contenido de purina en la cerveza podría tener un efecto importante para el peligro de gota al aumentar el efecto hiperuricémico del mismo alcohol. Si diversas bebidas alcohólicas tienen diversos efectos en el riesgo, este hecho tendría implicaciones prácticas para la prevención y el tratamiento de la patología. Para examinar esta participación, reumatólogos (Unidad de Reumatología, Departamento de Medicina, Hospital General de Massachusetts, Escuela de Medicina de Harvard, Boston, Estados Unidos) determinaron de forma prospectiva la relación entre el consumo total de alcohol, el tipo de bebida alcohólica y el riesgo de incidencia de gota. Para ello, utilizaron datos de cuestionarios bianuales durante 12 años (1986-98) y así investigar dicha relación en 47.150 participantes masculinos sin historial de enfermedad al comienzo del estudio. Además, se utilizó un cuestionario suplementario para comprobar los casos divulgados de gota por el “American Collage of Rheumatology”.
Los autores encontraron 730 casos confirmados de gota. Al compararlos con hombres que no habían bebido alcohol, el riesgo relativo (RR) multivariable de gota fue de un 1.32 (0.99-1.75, IC del 95%) para el consumo de 10.0-14.9 g/día de alcohol, RR de 1.49 (1.14-1.94) para 15.0-29.9 g/día, RR de 1.96 (1.48-2.60) para 30.0-49.9 g/día y RR de 2.53 (1.73-3.70) para 50 g/día. La consumición de cerveza demostró una asociación independiente más fuerte para el peligro de gota (RR 1.49; 1.32-1.70 con IC del 95%). El consumo de otros alcoholes también estuvo significativamente asociado a la gota (RR de 1.15 por bebida al día; 1.04-1.28 con IC del 95%); sin embargo y a diferencia de otros alcoholes, el vino no presentó dicha relación (RR 1.04; 0.88-1.22 con IC del 95%).
La interpretación final hecha por los autores, fue que el alcohol se asocia fuertemente a un riesgo reciente de gota. Este riesgo varía substancialmente según el tipo de bebida alcohólica: la cerveza confiere un peligro más grande comparado con otros alcoholes, mientras que el beber vino de forma moderada no aumentaría dicho riesgo.
Fuente bibliográfica
Lancet 2004 Apr 17; 363(9417):1277-81