Síndrome de ojo seco dificulta la salud visual en verano
El clima y el medio ambiente pueden empeorar esta condición y su prevalencia alcanza el 50% de la población mundial.
En Chile, se estima que cerca de 850 mil personas sufren de deficiencia visual y de ellas, unas 80 mil son ciegas. Según el segundo taller sobre ojo seco de la Sociedad para la Película Lagrimal y la Superficie Ocular, la prevalencia de este trastorno con o sin síntomas, varía entre un 5% a un 50% de la población mundial.
Se trata de una afección más común de lo que se cree y afecta con mayor frecuencia a mujeres debido a cambios hormonales. Esta enfermedad “puede generar visión borrosa intermitente y, en casos severos, impedir la apertura cómoda de los ojos para lograr ver nítido”, explica el oftalmólogo de Clínica Tarapacá, Sergio Abuauad.
Lo cierto es que, en los meses de verano, estos síntomas pueden aumentar como resultado de los factores ambientales propios la época, tal como el aumento de las temperaturas, el viento, ambientes secos y radiación ultravioleta, entre otros. “Es crucial cuidar los ojos durante todo el año, pero cuidar los ojos en verano, puede ser fundamental”, advierte el especialista.
Los principales factores de riesgo están relacionados a la edad, al género femenino, uso frecuente de aire acondicionado, disfunción de glándulas de meibomio, síndrome de Sjögren, uso de lentes de contacto, uso excesivo de pantallas, terapia de reemplazo.
Entre los instrumentos para detectar esta patología se encuentra el Keratograph 5M, un examen complementario y no invasivo que permite detectar cuánta lágrima está generando el paciente y cómo es su composición y dinámica. Todo esto, con el fin de objetivar cuánto logra durar protegiendo la superficie del ojo entre cada parpadeo.
“El examen es muy preciso en sus cálculos y cuenta con encuestas internacionales estandarizadas que permiten objetivar y clasificar la intensidad de los síntomas que está teniendo el paciente, pudiendo, por ejemplo, saber en detalle el tiempo exacto en que la lágrima se empieza a evaporar e, incluso, entrega un mapa de la zona del ojo donde ocurre esto”, señala el doctor Abuauad.
Esperar puede perjudicar el estado de la superficie ocular y generar secuelas que sean difíciles de revertir además de impedir una adecuada calidad de vida de las personas. Es por esto que el llamado es a no acostumbrarse a las molestias y solicitar una evaluación.
