Seminario internacional aborda lineamientos en neuroética
El encuentro se realizó en el marco de la conmemoración de los 180 años de la U. de Chile, en donde se discutió sobre desafíos políticos y académicos asociados a la neurociencia.
Especialistas nacionales e internacionales, y diversas disciplinas, abordaron temáticas relacionadas a cómo el estudio del cerebro se vincula con el contexto social del país y sus políticas públicas.
Organizado por el Departamento de Bioética y Humanidades Médicas de la Facultad de Medicina, junto con el Centro de Estudios de Ética Aplicada (CEDEA) y el Centro de Gerociencia, Salud Mental y Metabolismo (GERO), contó con la participación de destacados académicos, quienes compartieron experiencias y reflexiones sobre los desafíos éticos y políticos intersectoriales que surgen de la investigación interdisciplinaria del cerebro y de los hallazgos neurocientíficos.
Al respecto, el vicerrector de investigación y desarrollo de la Universidad de Chile, Enrique Aliste, sostuvo que este “evento es de máxima importancia para los desafíos globales que enfrentamos, los cuales están relacionados con la ética y el cruce entre ciencia y sociedad, donde la neurociencia puede aportar a las políticas públicas de desarrollo en términos de educación, salud y vulnerabilidades”, expresó.
Sumado a los objetivos de este encuentro, se dio espacio para el lanzamiento de la Iniciativa de Neuroética de la Universidad de Chile, la cual, en palabras del profesor Manuel Guerrero, “pondrá al día a nuestra institución en el escenario local, regional e internacional con una reflexión cuidadosa y argumentada del alcance que tienen los hallazgos neurocientíficos, las implicancias sociales, legales y políticas que tiene la investigación del cerebro humano, así como también el desarrollo de las neurotecnologías”.
Precisamente, la iniciativa trabajará sobre las preocupaciones que mantienen diversas disciplinas respecto al impacto de las nuevas tecnologías aplicadas al cerebro humano y los desafíos éticos, sociales y políticos. A su vez, abordará interdisciplinariamente los hallazgos neurocientíficos con los que se ha interpretado al humano.
“Lo que hace la neuroética es abordar que la investigación en cerebro se haga de forma responsable, que las tecnologías que se desarrollan para el uso del cerebro, por ejemplo, para enfermedades neurodegenerativas, hoy tomen en consideración los derechos de las personas, pero también reflexionar sobre las formas en que se ha interpretado al humano”, sostuvo Guerrero.
Por su parte, Mauricio Suárez, académico de la Facultad de Medicina de la Casa de Bello, valoró la importancia de esta instancia para la formación de nuevos investigadores. “No solo es importante que estudiantes aprendan sobre protocolos de ética, sino que vean cómo los científicos pueden aportar a una mayor comprensión del fenómeno moral y contribuir a la reflexión social en democracia. Que vean que el debate moral no es algo externo a su formación, como limitantes u obstáculos, sino que de él depende el futuro de la neurociencia”, aseguró el docente.
