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Como es tradición, más de 1200 asistentes se congregaron en la Ciudad Jardín para participar en el 53° Congreso Chileno de Ortopedia y Traumatología (Schot), actividad académica que todos los años plantea importantes desafíos al comité organizador.

Esta versión se desarrolló en los hoteles Sheraton Miramar y Enjoy del Mar y fue presidida por el doctor Francisco Javier Vergara González, quien encabezó la coordinación del atractivo programa científico que se trazó objetivos específicos abordando temas de actualidad.

“Este año, nuestro congreso quiso desarrollar de manera general las áreas de traumatología y kinesiología deportiva, independiente de los distintos tópicos que los subcomités abordaron. Además, implementamos cursos de instrucción, módulos más pequeños en los que se abordó un tema específico. Éstos los desarrollamos entre las 7:00 y 8:00 de la mañana”, destacó el doctor Vergara.

“Esta nueva alternativa, agregó, fue una apuesta que, en general, funcionó muy bien. Realizamos 10 cursos de instrucción que abordaron tópicos transversales como infecciones en artroscopia, paciente politraumatizado, evaluaciones biomecánicas de algunas patologías en deportistas, investigación y publicaciones, por nombrar algunos”. 

“Estos cursos se celebran de manera habitual en Estados Unidos y Europa. Por esa razón, quisimos insertar esa cultura académica dentro de nuestra actividad más importante del año. La idea es seguir desarrollándolo, para aprovechar mejor los tiempos, considerando que nuestro Congreso se ha ido reduciendo en días”, enfatizó el doctor Vergara. 

Además de esta novedad, “dentro de los temas principales hablamos de la actividad física como herramienta terapéutica. Siendo el aparato musculoesquelético uno de los órganos fundamentales en la realización de la actividad física, nos pareció importante revisar temas que afectan a nuestros pacientes, los que van desde la evaluación de las capacidades físicas, las alteraciones biomecánicas hasta las distintas lesiones del aparato locomotor que necesiten ser resueltas para permitir la realización de una actividad física o deportiva que sea beneficiosa para la salud integral de las personas, tanto en lo metabólico como en lo cardiovascular y lo psicológico”, agregó el especialista.

“Está demostrado que la actividad física practicada de manera razonable es beneficiosa para la salud, principalmente para las patologías crónicas como la obesidad, diabetes e hipertensión. Incluso, cánceres familiares disminuyen su frecuencia. En Estados Unidos existe una fundación llamada Exercise is medicine, creada con el objetivo de enseñar a los médicos a indicar y prescribirla y ese concepto fue el que revisamos para incorporarlo con nuestros pacientes”. 

A la hora de los balances finales, el doctor Vergara agradeció la asistencia, compromiso y disposición de todos los asistentes, “que hicieron de este congreso una actividad plena”. 

Además, aprovechó la instancia para recordar al doctor Fernando González, “quien fue miembro de nuestro directorio, del comité científico y que iba a ser futuro presidente de nuestra Sociedad. Un gran amigo, cuya pérdida nos conmovió a todos. Sabíamos que él tenía un gran empuje y que su legado, de alguna manera, estuvo presente durante todo el proceso de organización de esta actividad. Su partida brusca nos cambió un poco la percepción de la vida, pero sabemos que tenemos que seguir adelante como él habría querido”, puntualizó.