Prevén aumento de demencias para 2050
Cada septiembre se conmemora el Día Internacional del Alzheimer, patología que se caracteriza por la pérdida de la capacidad cognitiva, muchas veces asociada a trastornos de la conducta y síntomas psicológicos.
Olvidar compromisos y nombres, además de no recordar fechas importantes, son algunas de las características de esta patología que con el tiempo podría derivar en la pérdida de la autonomía.
Las proyecciones indican que el número total de personas con demencia alcance los 82 millones en 2030 y 152 millones en 2050, por lo que podría constituirse como un eje importante en el desarrollo de políticas públicas a nivel mundial.
Pese a que Chile no cuenta con datos epidemiológicos, sí se pueden realizar aproximaciones. Según el Estudio Nacional de Dependencia y Encuesta Nacional de Salud, se estima que la prevalencia sobre los 60 años es de un 3% y de un 36,3% en mayores de 85.
Por otra parte, según datos del Ministerio de Salud, en 2015 murieron más de 1.722 personas mayores de 70 años a causa del alzhéimer. "Los pacientes con demencia se caracterizan por la pérdida de funciones cognitivas en forma progresiva e irreversible, terminando con la pérdida de movilidad y consecuente postración", explica la neuróloga de Nueva Clínica Cordillera, Paz Arias.
La especialista agrega que el diagnóstico precoz es clave para realizar ensayos terapéuticos, considerando que sobre los 65 años se duplica su prevalencia cada 5 años.
En primera fase, el alzhéimer provoca olvido de eventos recientes, las personas se desorientan con facilidad y existen cambios en el comportamiento. "Luego pueden perder la capacidad de encontrar palabras, se altera el lenguaje, se afectan las capacidades para realizar actividades de la vida diaria, creando progresiva dependencia del cuidador y en algunos casos pueden presentarse alteraciones conductuales que incluye la agresividad", señala la neuróloga.
Según el Plan Nacional Preliminar para las demencias, se establece que en los países de mayor desarrollo existe una creciente cultura de estilo de vida saludable, no así en países de mediano o bajos ingresos.
De este modo, hacia el año 2050 se estima que un 70% de la población con demencia vivirá en regiones de menor desarrollo por lo que la implementación de campañas de salud en estos países podría ayudar a reducir el riesgo.
