Médicos son distinguidos como profesores eméritos
La E.U. Eliana Gaéte y los doctores Elisa Marusic y Fernando Orrego fueron reconocidos por su colaboración en la creación de la primera Escuela de Enfermería y la primera Facultad de Medicina en una universidad privada chilena, hace casi un cuarto de siglo.
Tras un emotivo acto, el consejo superior de la Universidad de los Andes distinguió a los tres profesionales en el marco de la ceremonia de conmemoración de los 24 años de vida de la casa de estudios, llevada a cabo en el Aula Magna de la Biblioteca.
En sus palabras de bienvenida, y ante un salón repleto de profesores, alumnos y funcionarios, el vicerrector académico Jaime Arancibia destacó que “24 años no son nada en la vida de una universidad, pero mucho en la vida de los profesores. Han servido siendo portadores de la impronta de la Universidad de los Andes”.
La profesora Eliana Gaete, enfermera de la Pontificia Universidad Católica de Chile y magíster en Salud Pública de la Universidad de Puerto Rico, elaboró el plan de estudios para la carrera de Enfermería de la UANDES y fue su primera directora de carrera.
La doctora Elisa Marusic, quien realizó un doctorado en la Universidad de Yale, y en donde además fue profesora visitante junto con desarrollar diversas investigaciones. Es una de las fundadoras de la facultad de medicina de la Universidad de los Andes.
En tanto, el doctor Fernando Orrego, médico cirujano de la Universidad de Chile. Tiene un postgrado en bioquímica de la Rockefeller University y trabajó directamente con Fritz Lipmann, Premio Nobel de Medicina.
Los resultados de las investigaciones del profesor Orrego han permitido elaborar una teoría general sobre los efectos de los tratamientos antidepresivos. Es, además, uno de los fundadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de los Andes y fue su primer decano.
En representación de los Profesores Eméritos, el profesor Orrego sostuvo que “los que debemos dar las gracias somos nosotros, por el privilegio de haber trabajado en esta universidad en donde existe un ambiente extraordinario, de una altura intelectual y espiritual extraordinaria. Es además una casa de gente sonriente y estos espacios tan bien cuidados reflejan el cariño por las cosas pequeñas”.
“Queremos agradecer porque la universidad nos permitió soñar y muchos de estos sueños se han convertido en realidad. Espero que se formen muchos científicos, que tengan una visión amplia del mundo y de su Creador”, concluyó Orrego.
Al final de la ceremonia, el Rector Orlando Poblete se dirigió a los presentes. “El sueño de los fundadores de la Universidad de los Andes de servir a la sociedad, basados en los ejemplos de San Josemaría, ha comenzado a plasmarse. Constatamos diariamente su presencia activa en la nación”.


Sr. Orlando Poblete y Dr. Fernando Orrego

Sr. Orlando Poblete y Dra. Elisa Marusic