Médicos conocen utilidades clínicas de los probióticos
El doctor Iván Aguancha Segrebe familiarizó a médicos internistas, generales y becados sobre los beneficios que entregan estos organismos vivos.
Con el objetivo de potenciar el desarrollo científico, así como de ayudar a la actualización y educación permanente de los profesionales de la salud, Laboratorios SAVAL realizó en el Centro SAVAL de Cooperación Científica una interesante puesta el día en el “Rol de los probióticos en tránsito intestinal”.
El encuentro contó con la participación de un importante grupo de profesionales de la Región de Valparaíso entre médicos generales, internistas y becados de la especialidad, quienes conocieron los beneficios y utilidades clínicas de los ellos.
La conferencia fue dictada por el doctor Iván Aguancha Segrebe, destacado médico internista y gastroenterólogo del Centro de Diagnóstico Digestivo (Cedid) de Viña del Mar y la Clínica Ciudad de Mar, quien señaló que “tratamos de manejar todo el espectro de los probióticos en el tubo digestivo, enfocado en el tránsito intestinal, pero haciendo énfasis en otros beneficios: como la prevención del cáncer, su utilidad en el síndrome de intestino irritable y en la diarrea post antibióticos”.
Los probióticos, dijo, son organismos mismos vivos que, suministrándolos en cantidades adecuadas, ejercen un beneficio para la salud. “En los últimos cinco a 10 años, el estudio y la venta de ellos ha triplicado. Por eso, la Organización Mundial de la Salud está siendo más estricta con la definición, porque se está sobrevendiendo el “concepto de beneficioso” en ciertos productos no lo tienen”.
“Los principales desarrolladores de los probióticos han sido las empresas alimenticias, porque éstos pueden estar incluidos dentro de los alimentos. Sin embargo, los probióticos de uso médico, si bien no se consideran medicamentos, deben ser adquiridos. No se pueden suplir con aquellos que están en los alimentos”, enfatizó.
Eso se debe, principalmente, a que los organismos vivos tienen acciones específicas, “por lo tanto cada cepa probiótica va a tener un efecto benéfico determinado para la salud. Por eso, encontramos algunos que afectan la parte inmunológica, la parte respiratoria o la digestiva y dentro de ella encontramos algunos específicos para la diarrea, la constipación, la distención abdominal o para mejorar la flora bacteriana”.
La actividad finalizó con una interesante rueda de preguntas, donde asistentes y expositor intercambiaron impresiones sobre un área que ha tenido numerosos avances en la última década.

Dres. Iván Aguancha y Liliana Contreras