La relevancia de diagnosticar el glaucoma de forma precoz
La patología afecta entre el uno y tres por ciento de la población mayor de 40 años, por lo que la OMS declaró su prevención como una prioridad.
El glaucoma es una afección ocular en la que se produce daño del nervio óptico, encargado de llevar la información de las distintas partes de nuestro campo de visión al cerebro, para ser procesada. A nivel mundial, afecta a más de 70 millones de personas, con un 10% de estos con ceguera bilateral.
“Se estima que perjudica entre el 1 a 3% de los adultos sobre 40 años. Si bien no se conoce por qué ocurre, estarían involucrados diversos factores en su desarrollo, como la presión intraocular, factores genéticos y vasculares, entre otros”, explica Felipe Petour, oftalmólogo de Clínica Bupa Santiago.
La gran mayoría de los pacientes con glaucoma no presentan síntomas hasta etapas tardías de la enfermedad, donde la pérdida del campo de visión es evidente y lamentablemente irreversible. Sin embargo, existe una forma especial de glaucoma, mucho menos frecuente, que aparece en forma aguda y rápida y que se presenta con disminución de la visión y dolor ocular intenso asociado a ojo rojo.
“Por eso es tan relevante la medición de la presión intraocular y el examen del nervio óptico durante la consulta oftalmológica, sobre todo en los mayores de 40 años. Para esto, se recomienda un chequeo a lo menos una vez al año”, sugiere el especialista.
Los factores de riesgo más relevantes para desarrollar glaucoma son la edad, presión intraocular, antecedentes familiares y otros aspectos como tener la córnea delgada, pacientes afroamericanos y de etnia latina, antecedentes de miopía, diabetes, hipertensión arterial, entre otros.
Si bien no es posible prevenir la afección, quienes tengan una presión ocular alterada el diagnóstico precoz permite iniciar el tratamiento para evitar que, en la mayoría de los casos, se pierda el campo visual.
“El único tratamiento demostrado para detener la progresión del glaucoma es reducir la presión intraocular. Esto se puede lograr de distintas maneras, ya sea con tratamiento médico en gotas, láser o cirugía”, concluye.
