De enfrentamiento y respuesta:
Hospital de Antofagasta conformó comité para casos de Ébola
Si bien las probabilidades de que existan casos son bajos, ya se cuenta con una unidad capaz de tratar al paciente y realizar contención aplicando las medidas adecuadas.
Según datos entregados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), a la fecha, se han producido mil 350 muertes por virus Ébola, de las cuales 576 se han dado en Liberia, el país que registra más fallecimientos por esta causa.
Ante este escenario, se están tomando las debidas medidas de prevención y enfrentamiento. Una de ellas, fue la conformación del Comité de Enfrentamiento y Respuesta a Enfermedad por virus Ébola en la ciudad de Antofagasta, el cual es integrado por un equipo multidisciplinario de especialistas y profesionales de la Dirección del Servicio de Salud Antofagasta y del Hospital Regional de Antofagasta.
El doctor Francisco Bueno Natusch, subdirector médico (s) del Servicio de Salud Antofagasta (SSA), informó que “el Servicio de Salud, en conjunto con el Hospital Regional, siguiendo los lineamientos ministeriales, han conformado este comité como plan de contingencia ante alguna eventualidad, estando preparados para distintos escenarios, aunque parezca casi imposible la llegada del virus”.
El infectólogo Pedro Usedo López, médico jefe de la Unidad de Infectología del Hospital Regional de Antofagasta, manifestó que “las probabilidades que llegue son muy bajas, porque se trata de un brote con aparición en diciembre del 2013, llevando varios meses en evolución, que se ha podido contener en el mismo lugar. Pero, a pesar de todo, siguiendo los lineamientos ministeriales, se ha conformado este comité en el caso que llegara algún caso de Ébola a la región”.
El especialista explicó que “este virus se contagia por vías de contacto, es decir, fluidos. No es un virus que se contagie por vía aérea, es un contagio por contacto o por elementos que estén contaminados. Las medidas de control y prevención son las que nosotros manejamos como país. Las condiciones culturales o la precariedad de los mecanismos sanitarios de los países donde comenzó el problema, favorecieron la diseminación de esta enfermedad de manera tan amplia”.
De todos modos, agregó, “el llamado a la opinión pública es que esta es una enfermedad infectocontagiosa. Es importante el lavado de manos, porque este es un virus que tiene la capacidad de morir en soluciones cloradas y en soluciones de alcohol gel. Y, por supuesto, se recomienda evitar viajar a las zonas de riesgo. Por el momento, esta enfermedad no tiene cura, pero se está trabajando en la elaboración de sueros para tratamiento”.

Dr. Pedro Usedo López