Dr. Gonzalo Matus aborda rol de brimonidina en glaucoma
El destacado oftalmólogo de Clínica Las Condes revisó la evidencia científica que avala la seguridad y eficacia de esta droga en la patología.
El glaucoma engloba un grupo de enfermedades que provocan daño progresivo del nervio óptico. Por lo general no presenta síntomas, y de no tratarse a tiempo puede resultar en la pérdida total de la visión.
Glaucoma primario de ángulo abierto es la forma más común de esta patología. Esta ocurre cuando la red trabecular del ojo se vuelve menos eficiente en drenar líquido elevando así la presión intraocular, principal responsable de la neuropatía óptica glaucomatosa que implica la muerte de las células ganglionares de la retina y de sus axones.
“No existen estudios nacionales específicos para medir glaucoma en la población general, por lo que se considera la proyección de la Sociedad Chilena de Glaucoma basada en estudios poblacionales y el censo del año 2002, que determina que habría una prevalencia que oscilaría entre 83.818 a 142.491 personas, de los cuales al menos la mitad desconoce su condición”, comentó el doctor Matus.
Respecto a la utilización de brimonidina -agonista 𝛂 andrenérgico- en el tratamiento del glaucoma, el oftalmólogo destacó que esta droga trabaja bajo un método de acción que disminuye la producción de humor acuoso y mejora el flujo uveo-escleral, y que además reduce la presión intraocular entre un 20 y 25%.
El uso de brimonidina ha sido aprobado por la Food and Drug Administration (FDA) para su utilización en casos de hipertensión ocular, glaucoma primario de ángulo abierto y otros usos como gel facial para la rosácea, eritema facial persistente y por vasoconstricción.
Finalmente, tras la revisión de varios estudios científicos, el doctor Matus concluyó que la brimonidina es una medicación de uso tópico, “que representa a un gran actor en la prevención de la ceguera”.

Dr. Gonzalo Matus Matus