Chile y el desafío de envejecer con salud
Cada vez más personas alcanzan la tercera edad en Chile, lo que plantea la necesidad de promover hábitos y entornos que garanticen calidad de vida, autonomía y bienestar emocional.
En octubre se conmemora el Mes de las Personas Mayores, una oportunidad para reflexionar sobre cómo Chile enfrenta el rápido envejecimiento de su población. Hoy, más de 3,4 millones de personas superan los 60 años, lo que refiere a un 18% de los habitantes del país. El desafío, según coinciden los expertos, no es solo llegar a edades avanzadas, sino hacerlo con plenitud física, emocional y social.
"Hoy sabemos que el gran desafío no es envejecer, sino hacerlo de manera saludable. Mantener rutinas de actividad física, alimentación balanceada y vínculos sociales es fundamental para prevenir el deterioro cognitivo y emocional. El envejecimiento activo debe ser visto como un proceso que empieza mucho antes de la vejez", señala el doctor Jorge Font, especialista en salud mental de Tarapacá Interclínica.
El rol de la salud emocional resulta crucial. Factores como la soledad o la pérdida de proyectos personales pueden afectar gravemente la calidad de vida. "La prevención en salud mental es tan importante como la física. Espacios de acompañamiento, estimulación cognitiva y actividades intergeneracionales permiten que los adultos mayores se sientan parte activa de la comunidad, reduciendo riesgos de depresión y ansiedad", añade el doctor Font.
La familia y el entorno cercano cumplen un papel insustituible: acompañar en decisiones, fomentar la participación en actividades y promover rutinas de autocuidado son acciones que fortalecen el bienestar. Gestos sencillos como caminar juntos, conversar o incluir a las personas mayores en celebraciones familiares refuerzan el ánimo y el sentido de pertenencia.
"La actividad física adaptada, ya sea a través de caminatas, ejercicios suaves o incluso baile, contribuye a preservar la movilidad y evitar caídas, uno de los problemas más frecuentes en esta etapa de la vida", explica el doctor Sergio Castro Henríquez, geriatra de Cordillera Interclínica.
La alimentación y el descanso también son pilares de un envejecimiento saludable. Mantener una dieta rica en frutas, verduras y proteínas de calidad ayuda a prevenir enfermedades crónicas y aportar energía diaria. Por su parte, el sueño reparador favorece la memoria, la concentración y el sistema inmunológico. "Cuidar la higiene del sueño -manteniendo horarios estables, evitando el exceso de pantallas antes de dormir y creando un ambiente tranquilo- es una de las medidas más efectivas para mejorar la calidad de vida en esta etapa", precisa el especialista.
Finalmente, la estimulación cognitiva a través de lectura, escritura, juegos de memoria o nuevas habilidades mantiene la mente activa y eleva la autoestima. "El cuidado del adulto mayor no debe entenderse únicamente como atención médica, sino como un compromiso integral de bienestar que involucra cuerpo, mente y entorno social. Fechas como esta nos recuerdan el desafío de vivir más años con dignidad y plenitud, entendiendo que el cuidado de las personas mayores es una tarea compartida entre familias, comunidades y sistemas de salud", concluye el doctor Castro.
