Avance diagnóstico en patología neuromuscular
Hospital de Tomé incorporó el examen a principios de 2019, sumando 456 pacientes beneficiados, lo que fue evaluado positivamente por autoridades de salud.
La electromiografía es una prueba diagnóstica que tiene por objeto evaluar el funcionamiento del sistema nervioso periférico, constituyéndose en una herramienta de gran utilidad para pesquisar o conocer el grado de compromiso en afecciones como polineuropatías, neuropatías por atrapamiento, lesiones traumáticas nerviosas, enfermedades desmielinizantes y de placa neuromuscular, esclerosis lateral amiotrófica, disfunciones del piso pélvico, alteraciones de la laringe, miopatías y radiculopatías cervicales y lumbares, entre otras.
Junto con esta capacidad de detección de trastornos o enfermedades neuromusculares, el examen permite localizar con exactitud la zona lesionada e identificar el tipo de estructura afectada, lo que permite iniciar con prontitud el tratamiento del paciente.
“Traumatología, reumatología, neurología, pediatría y medicina física y rehabilitación son las especialidades que solicitan esta prueba. De hecho, uno de los diagnósticos más frecuentes son los síndromes del túnel carpiano”, comentó el doctor Silvano Pino, neurofisiólogo clínico del Hospital de Tomé.
Precisamente, el recinto asistencial de la Región del Biobío materializó un importante avance al incorporar la electromiografía a sus prestaciones. Lo hizo a principios de 2019 y desde entonces ha beneficiado a 456 personas que se encontraban en lista de espera, apoyando además a la red del Servicio de Salud Talcahuano, resolviendo otros 102 casos derivados desde comunas vecinas, incluso desde el Hospital Las Higueras.
“Esperamos seguir trabajando en esta línea, porque la demanda es alta”, subrayó Carlos Vera Bugueño, director del Servicio de Salud Talcahuano.
