En Viña del Mar:
Abordan futuro de cuidados paliativos en Latinoamérica
La actividad, organizada por la Unidad de Dolor y Cuidados Paliativos del Hospital Gustavo Fricke, contó con la participación de expositores nacionales y extranjeros.
Los cuidados paliativos están destinados a personas afectadas por enfermedades crónicas, terminales o progresivas o del tipo neurodegenerativas, desde un punto de vista holístico, es decir, no sólo para aliviar el dolor físico, sino también para atender el sufrimiento espiritual del paciente y su familia desde el diagnóstico hasta el desenlace.
Con el objetivo de abordar el presente y futuro de estos cuidados en Chile y Latinoamérica, la Unidad de Dolor y Cuidados Paliativos del Hospital Gustavo Fricke de Viña del Mar desarrolló en el Hotel San Martín las II Jornadas de alivio del dolor, actividad que fue dirigida por la doctora Silvana Misseroni y que contó con la participación de expositores nacionales y extranjeros.
“Al momento de organizar este encuentro pensamos en que fuera una instancia de capacitación para profesionales que trabajan en las distintas unidades de cuidados paliativos a lo largo del país, para poder intercambiar experiencias y unificar criterios”, destacó la doctora Misseroni.
Por esta razón, el énfasis que se le dio a estas segundas jornadas “fue conocer la realidad chilena en las distintas unidades del país y también sacarla un poco hacia la experiencia del cuidado paliativo en Latinoamérica y conocer el trabajo en esta área de otros países, como Brasil y México”, agregó.
El completo programa también abordó temas relacionados con técnicas de autocuidado para los equipos de salud; conexión emocional y técnicas energéticas para su manejo; sedación paliativa; hidratación y alimentación en el paciente terminal; radioterapia paliativa; y medicina complementaria, entre otros.
La especialista explicó que como la visión de los cuidados paliativos es holística, “nos dimos cuenta que cuando hay solamente un enfoque terapéutico en lo físico o en lo biológico, perdemos muchos de los aspectos psicológicos y emocionales, que influyen profundamente en los procesos de enfermedad. Y como en los cuidados paliativos la meta es acompañar al paciente en su totalidad, incluimos temas de medicina complementaria en nuestro programa, sin dejar de lado la parte médica tradicional. Nos pareció muy relevante el poder considerar los fundamentos clínicos y la evidencia científica que hay detrás de estas terapias”.
Algunos asistentes concordaron que este tipo de atención no se remite sólo al final de la vida de un paciente, sino que puede –y ojalá que ese puede se cambiara por un debe- brindarse desde el inicio del tratamiento para mejorar la calidad de vida y aliviar los síntomas físicos, psicosociales y espirituales que producen enfermedades con alto impacto físico y emocional.
Por lo mismo, valoraron el que se haya abordado el tema desde una perspectiva transversal y que haya incorporado temas de medicina complementaria no sólo destinada a los médicos sino que a químicos farmacéuticos, enfermeras, psicólogos y otros profesionales de la salud que se desempeñan en el área paliativa.
“Este encuentro nos dio un espacio para reforzar la misión que la profesión médica debe tener en relación a la comunidad. Es decir, una visión completa, holística, general e integrada de los pacientes, no como enfermedad, sino que como personas que están padeciendo algún problema de salud”, puntualizó la doctora Misseroni.

Dres. Juan Reyes y Silvana Misseroni

Dras. Ana Carolina Salas y Margarita Estefan

Dres. Ximena Rossat, Judith Campos y María Angélica Toledo

Dres. Yolanda Rayo y Jaime Peralta