Entró en vigencia nueva Ley de restricción al consumo de tabaco
De acuerdo a los datos entregados por el ministerio de Salud, el 43 por ciento de la población adulta y más del 30 por ciento de los menores de 18 años son fumadores. Ante esta realidad se aprobó la nueva Ley Antitabaco, normativa que tiene como objetivo desincentivar el consumo de este producto que está relacionado con la muerte anual de cinco millones de personas en el mundo, de las cuales 14 mil son chilenas y defender la salud de los no fumadores.
Es por eso que el lunes 14 de agosto de 2006 entró en vigencia la primera etapa de la ley de restricción al consumo de tabaco, medida que está orientada a prevenir el consumo de tabaco principalmente en los más jóvenes y a disminuir la ingesta de este producto con el fin de reducir el riesgo de contraer patologías asociadas al tabaco como cáncer de pulmón, de laringe, de esófago; enfermedades que afectan al sistema cardiovascular, como los accidentes vasculares cerebrales; o patologías del sistema respiratorio, como infecciones respiratorias agudas; y, en el caso de los hijos de madre fumadora, disminución de la función pulmonar.
Con esta nueva ley se fortalecen, entre otros aspectos, las regulaciones de su antecesora; se protege a los menores de edad y a los no fumadores mediante la promoción de ambientes libres de humo de tabaco; y se ayuda a crear conciencia en la población acerca de los nocivos efectos del tabaco, que no sólo afecta a quien lo consume, sino también a los “fumadores pasivos”.
Durante la semana se realizará una marcha blanca para que tanto las personas como las empresas, centros comerciales, quioscos y restaurantes se acomoden a la nueva legislación, por lo que durante los primeros días no se aplicarán multas, sino partes de cortesía.
La entrada en vigencia de la ley se complementará con una campaña destinada a los niños y jóvenes que el ministerio de Salud lanzará en los próximos días a través de afiches que se colocarán en lugares de uso público como el metro, consultorios y colegios.
La evidencia científica acumulada a nivel mundial permite afirmar que el consumo de tabaco es hoy la principal causa prevenible de enfermedad y muerte en el mundo, constituyéndose en una verdadera epidemia.
