Promueven microarreglos de DNA para detección de cáncer
En la actualidad, tecnologÃa de microarreglos o arreglos de matriz representa un avance significativo en el diagnóstico masivo de enfermedades humanas. Es una nueva manera de estudiar cómo interactúan entre sà un gran número de genes y cómo las redes regulatorias de la célula controlan enormes baterÃas de genes simultáneamente.
Esta técnica crea las micromatrices utilizando un computador para aplicar con alta precisión, gotas minúsculas que contienen ADN de genes sobre un portaobjetos. Luego las placas se hibridizan con ADN complementario marcado en forma fluorescente o radiactiva y un computador mide la intensidad de cada punto fluorescente o radioactivo. Con esto se puede saber qué tanto de un fragmento de ADN se encuentra presente y en ciertos tipos de micromatrices también es un indicador de la actividad de un gen especÃfico.
Esta tecnologÃa –que permitirá la generación de una medicina personalizada, potencialmente capaz de tener estrategias más efectivas de tratamiento y prevención de enfermedades- todavÃa no está disponible en el área de detección temprana de cáncer a nivel de centros médicos y de salud humana en Latinoamérica, sino que es parte de investigaciones especÃficas de grupos bien constituidos, como es el grupo del Ulises Urzúa, académico y miembro del Programa de BiologÃa Celular y Molecular del Instituto de Ciencias Biomédicas de la Facultad de Medicina Universidad de Chile, que junto a su equipo de trabajo investiga hace más de cinco años el cáncer ovárico usando chip de ADN.
A través de una video conferencia, el doctor Urzúa compartió con los alumnos de la Facultad de Medicina de la Universidad de Antofagasta (UA) una clase teórico-práctica sobre el tema y las aplicaciones de esta herramienta en la detección temprana de cáncer.
Dentro de la clase, el especialista manifestó que la tecnologÃa de las micromatrices está revolucionando la manera de cómo estudiamos y comparamos la actividad de muchos genes simultáneamente y que el problema sólo radica en los altos costos que esta técnica implica.
Los futuros médicos y biotecnólogos tuvieron la oportunidad de manipular datos reales de chip de ADN y lograron analizar e interpretar los microarreglos asà como normalizar resultados de miles de genes provenientes de una muestra de cáncer ovárico.
