El primer centro de reproducción asistida de la Región de Valparaíso, que atenderá a pacientes del sistema público de salud que, hasta la fecha, no tenían solución a sus problemas aparte del sistema privado, inauguró la Universidad de Valparaíso (UV). Se trata del Centro de Investigación en Reproducción Humana, instalado en dependencias de la Facultad de Medicina y que integrará al Hospital Carlos van Buren, uniendo además el trabajo clínico con las ciencias básicas.

La doctora Verónica Chamy, directora del Departamento de Obstetricia y Ginecología de la Escuela de Medicina de la UV, es también la directora clínica del Centro de Investigación en Reproducción Humana, quien señaló que actualmente este problema afecta al 15 por ciento de la población fértil, una cifra bastante alta para un problema prevalente.

Lo que se busca es entregar soluciones a las pacientes antes de llegar a la fertilización in vitro. Hasta el momento las pacientes diagnosticadas con infertilidad que ingresaban al hospital, podían optar a los 10 cupos que entrega el Servicio de Salud para una fertilización. Al no realizarse el trabajo intermedio, se ocupaban rápidamente los cupos del tratamiento cuando realmente el problema podía solucionarse con procedimientos de menor complejidad como estimulación de la ovulación, inseminación intrauterina, cirugía laparoscópica y cirugía histeroscópica.

Ahora el procedimiento funciona de la siguiente manera: se pesquisa a la paciente en el consultorio; es derivada al hospital, donde se hace el manejo de la parte básica. Luego un grupo de especialistas decide si es apta para ser tratada en el laboratorio de baja complejidad de la universidad. Todo dentro de un convenio con el Fondo Nacional de Salud (Fonasa)

“Yo siempre había pensado que nuestra población usuaria de los sistemas públicos de salud estaba absolutamente en desventaja en lo que respecta a los diagnósticos y a los tratamientos de infertilidad y creo que esto viene a ser un aporte importantísimo de la Universidad para integrar y solucionar ese problema a nivel de la baja complejidad, que es lo que hay que hacer en toda unidad de reproducción, y después pasar a la alta complejidad, porque si no, no tiene sentido”.

El Centro de Investigación en Reproducción Humana estará completamente operativo en 2011 y el próximo año partiría una segunda etapa, relacionada con la fecundación in vitro, “que significa, indudablemente, destinar fondos, porque son equipamientos más caros. Pero si es que se integra esta unidad, tanto al servicio público como al servicio privado, sin fines de lucro, junto con recursos que la Universidad, se pueden generar recursos para poder desarrollar un polo. Sería la única universidad que tendría este desarrollo en reproducción humana y en investigación en reproducción. Existen en Santiago y Concepción hay, pero acá en la zona será el único amparado por una universidad”.