En abril de 2007 la Facultad de Medicina de la Universidad de Antofagasta creó la Especialidad de Pediatría con el fin de que aquellos profesionales que desearan especializarse en esa área no tuvieran que viajar al centro del país.

A tres años de dicho acontecimiento histórico, de profundo impacto para el desarrollo de la zona norte del país, el doctor Antonio Cárdenas, jefe del Servicio de Pediatría del Hospital Regional y uno de los precursores del proyecto celebró el egresó de sus tres primeras pediatras formadas en la zona.

Se trata de las doctoras Carolina Ávalos Fernández, Tatiana Alvarado Romero, ambas de la Universidad de Antofagasta; y Kim Lan Alliu Moscopulos, egresada de la Universidad de Concepción.

Para celebrar dicho acontecimiento, el pasado viernes 11 de junio se realizó un desayuno de camaradería que contó con la presencia de diversas autoridades universitarias; docentes; médicos de la UCI Pediátrica como las doctoras Pamela Schellmann y Marcia Vega; el doctor Jorge Aliga, jefe de Cirugía Infantil; prácticamente todos los becados de pediatría de las últimas tres generaciones de la Universidad de Antofagasta y de representantes de Laboratorios SAVAL.

En la oportunidad, el doctor Cárdenas destacó el proceso que siguieron las tres pediatras, que –a su juicio- fue sido muy difícil. “Cuando partimos no todos estaban convencidos. Pero hoy podemos decir que el Servicio de Pediatría sería muy distinto sin los becados. Nos queda mucho por avanzar y consolidar, pero tengo esperanza en la gente nueva”.

Calificó estos años como “un periodo de mucho aprendizaje, ya que cuando partimos ninguno tenía experiencia en postgrado y esto se acentúa aún más si estamos tan lejos de los grandes centros de estudio. La gran dicha que tenemos es haber terminado lo que empezamos. Las tres becadas, puedo asegurar, son de altísima calidad y están en condiciones de desempeñarse en cualquier lugar del país o el extranjero. Una de ellas ya está trabajando y las otras dos van a continuar su subespecialidad, cosa que hace unos años era impensable”.

La doctora Alliu señaló que, a pesar de haber estudiado medicina fuera de la región, optó por realizar su beca en ella porque se comprometió “con el proyecto ofrecido por la Universidad de Antofagasta que beneficiará a mi ciudad. Para mí es un orgullo formar parte de la primera generación de pediatras egresadas y, por lo mismo, tengo ganas de aportar con la medicina regional”.

Por su parte, la doctora Alvarado dijo sentirse muy honrada por formar parte de esta generación. “Yo estudié en la Universidad de Antofagasta y tenía un vínculo muy fuerte con los docentes y, por supuesto, con la región. Por lo que hoy, como especialista, espero poder brindar un apoyo asistencial acorde a las necesidades de los pacientes y así ir disminuyendo el déficit de especialistas que se necesitan en el área pediátrica en la zona norte del país”.

Al finalizar la ceremonia, Laboratorios SAVAL entregó un presente a las nuevas pediatras y les deseo un exitoso futuro profesional.