Chile ya se encuentra en campaña de vacunación contra el virus de Influenza Humana AH1N1. Sin embargo, informaciones que circulan por Internet cuestionan la calidad de la vacuna y alertan sobre supuestos efectos nocivos.

El doctor Mario Calvo Arellano, destacado alergólogo, vicepresidente de la Sociedad Chilena de Infectología y académico de la Facultad de Medicina de la Universidad Austral de Chile (UACh), entregó antecedentes que permiten aclarar y disminuir la preocupación en torno a este tema.

Una de las consecuencias positivas más importantes ligadas a la vacunación, es lograr disminuir las hospitalizaciones y las complicaciones por influenza en el país. Sin embargo, la respuesta de la población a este llamado no ha sido la esperada: de un total de 4 millones de personas que deben inmunizarse, sólo lo han hecho 600 mil.

Para el doctor Calvo, la actitud de no querer vacunarse es preocupante ya que "si el bajo porcentaje se mantiene, se sobrecargarían los centros de salud”. Tema preocupante, si consideramos que con el reciente terremoto el sistema cuenta con 4 mil camas menos. “Lo más probable es que no haya espacio para hospitalizar a tantas personas y además puede haber contagio intrahospitalario", señaló.

Respecto a la calidad del producto que se distribuye en nuestro país, el académico aseguró que "la vacuna que el Gobierno compró es totalmente segura. Debe quedar claro que no se están haciendo experimentos de ningún tipo".

En relación a la información acerca de reacciones adversas en sectores de la población en países extranjeros, indicó que este año se han creado varias vacunas en el mundo para combatir el virus AH1N1.

"Están las de cultivos celulares, donde se reproduce el virus y la cepa se atenúa o inactiva, sin que este virus infecte o genere enfermedad importante en la persona. Otra, es la que se elabora con huevo, pero en una cantidad más baja, agregándole otra sustancia que hace que sea mucho más reactante", resaltó.

Esta última es la generó la alarma, ya que "hubo problemas con un lote en el hemisferio norte, con reacciones anafilácticas severas, pero ninguno de estos dos tipos de vacuna llegaron a Chile".
Este año los grupos objetivo para la vacunación son las mujeres embarazadas con más de 13 semanas de gestación; los niños de entre 6 y 23 meses de edad; los enfermos crónicos de todas las edades; y los adultos mayores de 65 años a nivel nacional.

En las regiones de O'Higgins, Maule, Biobío y Araucanía, las más afectadas por el sismo, el ministerio de Salud decidió reforzar el programa de vacunación e incluir a los menores de entre 2 y 14 años, como medida de prevención.