Adaptación al trabajo y depresión post vacacional
El estrés o síndrome postvacacional corresponde a un estado de adaptación que se manifiesta después de un largo período de descanso o cambio de rutina y que sólo busca preparar al organismo para un nivel de trabajo mucho mayor al que ha tenido durante las vacaciones.
Si bien es un proceso adaptativo completamente normal que suele durar un par de días, hay personas que no lograr superar los síntomas. Cuando el cansancio inexplicable, insomnio, somnolencia, sopor, preocupación constante, angustia, alteraciones en la alimentación y reticencia a incorporarse a la rutina anual son persistentes y afectan en quehacer diario de la persona es necesario generar pautas de trabajo y control de la ansiedad con un profesional.
El doctor Carlos Cruz Marín, psiquiatra y docente de la Escuela de Medicina de la Universidad Andrés Bello (UNAB), reconoce que el regreso de vacaciones, en muchos casos es difícil, pero no imposible y que “cuando la persona siente que no ha podido descansar, a pesar de haber tenido el tiempo, y los síntomas que mencionamos continúan, se debe consultar a un especialista”.
“La depresión es una enfermedad que puede comenzar en cualquier período del año o frente a diversas circunstancias como la pérdida de un trabajo o una separación”, explicó.
Por ello, el docente señala que a la hora de regresar al trabajo se tiene que entender que “hay un cambio y que se cansará al comienzo, no por desgaste sino por el proceso de ajuste. Es importante retomar la carga de trabajo paulatinamente, ir resolviendo lo más urgente, ponerse al día en los correos y las novedades y planificar las tareas para distribuirlas en los días o semanas siguientes”.
Respecto al tratamiento para un depresivo post vacacional, el doctor Cruz subraya que “puede requerir una terapia psicológica o fármacos. También puede que –en realidad- se trate de una persona que le esté costando ajustarse y requerirá consejo y guía”, concluyó.
