Tras cinco décadas, Dr. Florín Yañez deja Hospital Barros Luco
Con casi cien años de antigüedad, el Hospital Barros Luco es uno de los centros asistenciales más antiguos del país, guardando entre sus muros múltiples historias que forman parte del devenir de Chile en el último siglo.
Luego de la construcción de los hospitales del Salvador en Providencia y San Vicente de Paul en la Avenida Independencia, en 1888 se propuso a la autoridad la edificación de un hospital en el sector sur o sur poniente de la ciudad. En una chacra llamada “La Cuadra”, en el sector de El Llano Subercaseaux, el establecimiento comenzó a ser construido en 1911 siguiendo los planos diseñados por el arquitecto Frederick Ruppel. En los años siguientes se implementó el Policlínico y los servicios de Medicina, Cirugía, Ginecología, Maternidad, la Farmacia del Policlínico, la Unidad de Urgencia, el Hospital Trudeau para tuberculosos, el Servicio de Kinesiología, el Banco de Sangre, el Policlínico Adosado de Especialidades, el Policlínico Maternal, el Servicio de Anatomía Patológica y de Psiquiatría, además se implementaron espacios religiosos como una Comunidad y una Capilla.
Uno de los médicos que fue testigo de parte de estos progresos y que forma parte de la historia de este establecimiento asistencial durante las últimas cinco décadas es el reumatólogo Florín Yáñez, quien se desempeñó por 56 años en el Hospital Barros Luco y que recientemente dejó el establecimiento.
La ceremonia de despedida se realizó el 25 de junio, oportunidad en la que asistieron un selecto grupo de becados y médicos del establecimiento, entre quienes se encontraban los doctores Lisandro Viveros y Crisologo Venegas, en representación de las autoridades del hospital.
El doctor Florín Yánez nació en la ciudad de Osorno el año 1925, hace 52 años contrajo matrimonio con Isaura Garrido Soto, tiene cuatro hijos y cuatro nietos. Ha dedicado toda su vida a la labor profesional realizando tareas en investigación, clínica y docencia, manifestando siempre responsabilidad, ética y absoluta entrega a sus enfermos.
