Dra. Susana Urrutia Riveros:
"El Ayurveda es un potenciador para la medicina occidental"
Tras haberse formado como pediatra, la especialista inició un camino que la llevó a descubrir los beneficios de la medicina tradicional india y evidenciar los resultados en sus pacientes.
Tras realizar un curso de Ayurveda impartido en Brasil por la Maharishi International University en 1986, la doctora Susana Urrutia Riveros, pediatra de la Universidad de Chile, comenzó a interesarse cada vez más en esta milenaria práctica que integra mente, emociones y fisiología.
Posterior a ello, complementó sus estudios en la Escuela de Medicina Védica de la Maharishi International Management University en Iowa, Estados Unidos y en la Maharishi Vedic University de Valkenburg en los Países Bajos.
Debido a su constante formación y visitas a la India, ha encontrado un espacio donde puede fusionar la medicina occidental y oriental, lo cual le ha permitido presenciar positivos cambios y mejoras tanto en sus pacientes como en ella misma.
La doctora Urrutia abrió las puertas de su consulta para ahondar sobre su experiencia con el Ayurveda y comentar cómo ha impactado en su práctica como profesional de la salud.
- Doctora, ¿podría explicar el concepto de Ayurveda?
En idioma sánscrito Ayur significa vida y Veda conocimiento: literalmente significa "la ciencia de la vida". Se trata de la medicina tradicional de la India, que tiene más de cinco mil años de antigüedad y que ha sido reformulada científicamente durante los últimos 40 años, tanto en la India como en Occidente. Tiene tal relevancia que, incluso, posee su propio ministro de salud. Debido a su concepción y metodología se integra con la medicina moderna, complementando en aportes y soluciones. El Ayurveda permite a las personas sanas conservar su buena salud y al enfermo alcanzarla. Es capaz de tratar la causa de la enfermedad en vez de solo atenuar síntomas.
- ¿De qué manera actúa?
Pone el énfasis en la práctica de la vida saludable por medio de recomendaciones basadas en una alimentación sana y en respetar los horarios de sueño, entre otros temas relacionados al cotidiano de cada individuo. Por otra parte, el Ayurveda busca tres grandes principios metabólicos o Doshas: estos son el Vata, que gobierna y controla los aspectos del movimiento y los procesos de eliminación asociados con la neurofisiología y la actividad mental; Pitta, relacionado con la energía y el metabolismo y que se ubica en el sistema digestivo, y Kapha, que es el aspecto que gobierna el sistema estructural y todos los fluidos del cuerpo, ubicado en la estructura ósea y muscular. Para el Ayurveda, la mejor forma de prevención es el balance de las Doshas, y para mantenerlo se recomienda la práctica de meditación trascendental, herramienta que cuenta con respaldo científico.
- ¿Podría hacer una comparación con la medicina occidental?
Cada metodología está científicamente comprobada, no me gustaría comparar, sin embargo, sí puedo decir que la aplicación de ambas alcanza mayores y mejores resultados; pues permite tener una visión mucho más global del paciente y su patología.
- Existen publicaciones de Harvard y Stanford que avalan esta forma de medicina…
En los últimos 50 años, muchos investigadores han intentado demostrar la influencia que la mente tiene sobre el cuerpo, área en la que destacan los trabajos del Herbert Benson, neurofisiólogo y profesor de la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard y Robert Wallace, físico y doctor en fisiología de la Universidad de California, quienes a mediados de los años 60 demostraron que la técnica de la meditación trascendental producía varios efectos beneficiosos, tal como la disminución en el consumo de oxígeno y en el ritmo metabólico; cambios en el ritmo respiratorio, llegando a cuatro ciclos por minuto y mayor sincronía de la actividad eléctrica de los hemisferios cerebrales. En cuanto a publicaciones más recientes, en 2000 la revista Stroke publicó un paper que demostró la reducción del grosor de las placas de ateroma de las carótidas por la acción exclusiva de la práctica de la misma técnica. Fue un trabajo que tuvo revuelo en todo el mundo.
- ¿Cómo ha influido en usted la práctica del Ayurveda como profesional de la salud?
Siempre he pensado que he sido bendecida por el universo. Me ha permitido practicarla en mí, en mi familia y pacientes. He podido ver al ser humano de una manera distinta, tener otro tipo de cercanía, establecer vínculos.
- ¿Considera necesaria la práctica del Ayurveda en Chile?
Lo veo con un futuro muy próspero, pero es un tema que toma tiempo, porque es cambiar el enfoque del pensamiento. Es decir, habría que cambiar la estructura de la mente occidental, y modificarnos hacia una apertura de conciencia distinta. Se necesita comprender el sistema orgánico desde un terreno más profundo, y eso significa tiempo. Y no se trata de que el médico alópata se dedique en pleno al Ayurveda, sino que tome conceptos básicos que le permitan hacer una integración entre mente, cuerpo y fisiología. Definitivamente sería un aporte. Considero que es un potenciador de la medicina occidental. Además, alopáticamente, muchas veces, nos quedamos cortos con la prevención, entonces por qué no hacer la unión.
Por María Ignacia Meyerholz
