Funcionarios y equipos de apoyo del Hospital Luis Calvo Mackenna se reunieron para celebrar la esperada inauguración del edificio que alberga a la renovada Unidad de Paciente Crítico (UPC). Se trata de una planta de tres pisos que contempla 3.115 m2, que permitirá entregar mayor y mejor atención para los niños que se atienden en el recinto, tanto en su unidad pediátrica como neonatal.  

Por medio de una ceremonia dirigida por el doctor Carlos Acuña, jefe de la UPC, se realizó un reconocimiento a quienes levantaron la Unidad hace casi 50 años. “Somos un equipo que desde el punto de vista técnico, destaca como el más complejo del país en esta línea, entregando atención a las patologías de mayor complejidad. Sin embargo, lo más relevante aquí son las personas, porque sin ellas no podríamos celebrar lo que celebramos hoy”, mencionó.

De la misma forma, el especialista subrayó la relevancia de recordar y aprender de quienes marcaron e hicieron historia en la institución. “Nosotros como UPC estamos próximos a cumplir 50 años y es un honor para mí liderar este equipo, que tiene un mix de experiencia, juventud y mucha proyección. Solo tengo palabras de agradecimiento para todos los que forjaron esta unidad; porque reconocer nuestras raíces nos hace fuerte y nos permite seguir creciendo. Mi mensaje es que no nos olvidemos de dónde vinimos porque eso nos va a permitir crecer”, aseguró.

En esa misma línea, la jefa de Gestión del Cuidado de la UPC, EU Marcela Fredes, agradeció a los funcionarios que antecedieron su labor y que marcaron el ejercicio de la Unidad. “Es una lista larga de nombres y muchos recuerdos. Nada de lo que hacemos sería así, si otros no hubieran caminado delante de nosotros”, destacó.

Finalmente el director del Hospital, doctor Jorge Lastra, mencionó que la nueva unidad es fruto de la historia, y de un esfuerzo que ha concitado la preocupación de muchos actores de distintas áreas. “Hoy como hospital estamos cumpliendo un rol tremendamente importante en lo que es el desarrollo de la complejidad; y nosotros somos parte de una estructura que la tensiona desde distintas áreas. Junto con celebrar este espacio tenemos que ser capaces de ver cómo construimos las relaciones con los otros, de manera que ahora podamos responder al desafío de la integración”, señaló.

Finalizado el encuentro, y como una forma de destacar su aporte en materia de unidades de paciente crítico, las autoridades del hospital dieron por inaugurado el auditorio del servicio, el que lleva el nombre del doctor Jaime Cordero Thompson: médico distinguido como "Espíritu del Calvo Mackenna" por su carácter docente, el afán de investigar, la curiosidad incesante y la formación de profesionales.