Pediatría
Inmunización de rutina controla la gastroenteritis por rotavirus
Antes de la introducción de la vacuna contra el rotavirus en los Estados Unidos el 2006, el virus era la causa más común de gastroenteritis severa en niños menores de 5 años de edad. Aunque la mortalidad era poco frecuente, con un estimado de 20 a 60 muertes cada año, la gastroenteritis provocaba 55.000 a 70.000 hospitalizaciones, 200.000 visitas a los departamentos de emergencia y 400.000 consultas externas cada año. Esta morbilidad creó una importante carga económica, con elevados costos directos anuales.
Un equipo del CDC (siglas en inglés para Disease Control and Prevention) en Atlanta, Estados Unidos, revisó los datos publicados al respecto con la finalidad de resumir la experiencia norteamericana durante los primeros 3 años de un programa de vacunación contra el rotavirus.
El rotavirus estacional se retrasó y disminuyó en magnitud en comparación con la etapa anterior a la vacuna. Las hospitalizaciones, visitas a urgencias y consultas externas por gastroenteritis disminuyeron drásticamente en los niños menores de 5 años de edad, incluidos en aquellos sin edad adecuada para recibir la vacuna, sugiriendo beneficios indirectos de la vacunación. La vacuna contra el rotavirus fue ampliamente aceptada por los pediatras. La cobertura ha sido cada vez mayor, pero sigue siendo inferior a los niveles de cobertura de otras vacunas infantiles de rutina.
En conclusión, la aplicación de la inmunización infantil de rutina contra el rotavirus redujo rápida y radicalmente la presencia de gastroenteritis por rotavirus en niños de Estados Unidos. Es necesario el monitoreo continuo de la diarrea para determinar si la inmunidad se desvanece en el tiempo y cuantificar mejor los beneficios indirectos de la vacunación. La vigilancia también permitiría realizar un seguimiento del impacto a largo plazo de la vacunación en la epidemiología del rotavirus.
