Ráfagas de Cultura y Arte

106 donde podemos encontrar gran diversidad de flora y fauna. Todos ellos, en mayor o menor cantidad, suministran hábitat a peces, crustáceos, anfibios, reptiles, aves migratorias, entre otros. En Chile somos excepcionalmente diversos en estos ambientes. Recorriéndolo podemos encontrar a lo largo de toda la costa, estuarios, lagunas costeras o marisma; a lo largo de la Cordillera de los Andes, salares, lagunas salobres, bofedales, vegas, ríos, lagos y lagunas. Hacia el sur de nuestro bello país, es posible reconocer a los humedales de turberas, que son grandes sumideros de gases de efecto invernadero, o los humedales boscosos, conocidos como hualves o pitrantos. En todos ellos podremos observar y fotografiar una gran variedad de aves. En la ciudad, si nos detenemos un momento abstrayéndonos del ruido y la vorágine, podremos observar mirlos, gorriones, jilgueros, chincoles, palomas, tórtolas e incluso algunas aves rapaces como tiuques, lechuzas, águilas y aguiluchos. No hace mucho subieron a la web fotografías de un águila chilena, Águila Mora, cazando palomas en Santiago Centro, muy cerca de la plaza de armas. El parque metropolitano, debido a la gran cantidad de árboles existentes ahí, es el hábitat de grandes rapaces como aguiluchos, lechuzas y peucos. También en la zona norte de la capital, así como en las comunas del sur del área metropolitana, se pueden ver lechuzas y halcones pequeños, los cernícalos. En la comuna de San Bernardo, en el Cerro Chena, se avistan águilas, cóndores, búhos pequeños llamados chunchos y pequenes. Como pueden ver ahora, el que quiere practicar el avistamiento de aves puede hacerlo desde la comodidad de su hogar y organizando bellos paseos. Cada fotografía relata una historia. La historia implícita en una fotografía tiene elementos propios de la misma imagen, como de las emociones que generan en el observador. En el caso de la fotografía de aves, tiene también el recuerdo del fotógrafo en relación con la sensación del viento, ruidos ambientales y la situación vivida esperando el momento propicio para fotografiar al ave. Para mí es una experiencia en la que disfruto de los momentos previos, sintiendo el viento, calor del sol, olores y diferentes trinos de aves, esperando a que el ave se pose, gire su cabeza y me mire. Ahora espero que disfruten de un breve paseo por diferentes lugares de Chile, dónde tuve la oportunidad de tomar estas fotografías. Área Metropolitana, sector sur. Vivo en San Bernardo y en la zona de Nos hay varias parcelas. Sigue siendo na zona semi rural. Ahí pude capturar algunas aves pequeñas que se alimentan de semillas y granos. Les presento al Tijeral, llamado así por la forma de su cola que asemeja una tijera abierta. Se caracteriza por ser de tamaño pequeño, mide unos 16 cm, tiene un “capuchón” café, plumas de tonos café en el dorso y de tonos más claros en el abdomen donde da el aspecto de tener pequeñas manchas más oscuras. Suele alimentarse de insectos pequeños, siendo sus favoritos pulgones y pequeñas arañitas. Se suele observar solitario o en grupos pequeños de dos o tres. Tijeral, Nos. San Bernardo El Cachudito, es otra ave pequeña, mide cerca de 11 cms. Más pequeña que el Tijeral con el que comparte hábitat. Suele verse revoloteando alrededor de grandes árboles buscando insectos. Su canto es más un corto chillido, agudo. Es muy veloz y cambia su posadero varias veces. Se caracteriza por tener un moño de plumas en su cabeza por lo que recibe su nombre. En su pecho se pueden ver plumas oscuras que lo visten a rayas. Habitualmente se puede observar en grupo.

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