GLAUCOMA

266 Complicaciones en Trabeculectomía factores de riesgo a desarrollar infecciones de la ampolla filtrante se incluyen las ampollas de paredes delgadas y avasculares, alta miopía, infecciones respiratorias crónicas, cirugías filtrantes inferiores o expuestas y diabetes mellitus44. La incidencia de esta complicación se estima en un 2%, llegando en algunos casos hasta un 6% de blebitis y 7,5% de endoftalmitis45. Es importante detectar los signos precoces de infección, como ser secreción, dolor, enrojecimiento de la ampolla, o el signo de blanco sobre rojo, donde se observa el foco de infección activo, sobre el tejido conjuntival inflamado. Fig. 34. En caso de blebitis, se debe manejar con antibióticos de amplio espectro e incluso tratamiento intraocular, ya que pese a que la presencia del cristalino, lente o capsula posterior intacta, funciona como una barrera a la endoftalmitis, esta barrera no es absoluta46. Ampolla disestésica o sintomática. A veces se forman ampollas gigantes que invaden la córnea. La ampolla puede ser expuesta, gigante, corneal, muy elevada (con Dellen), fig. 35. Normalmente las ampollas filtrantes son bien toleradas, pese a que los pacientes pueden reportar cierto grado de incomodidad. Los síntomas normalmente se relacionan a ampollas grandes, de extensión nasal o que invaden la córnea47, fig. 36. Los síntomas suelen relacionarse a alteraciones de la superficie, como queratitis punctata, alteraciones del film lagrimal, irregularidades en la superficie, o formación de Dellen, normalmente manifestados como sensación de cuerpo extraño, y visión alterada. El tratamiento consiste en el uso continuo de lágrimas artificiales, si los síntomas persisten, se puede considerar una reparación quirúrgica47. Se pueden hacer suturas de compresión, para reducir el tamaño de la ampolla. Estas se realizan con nylon 9-0 o 10-0, haciendo una pasada corneal anterior a la ampolla, y una pasada posterior, que atraviese conjuntiva y epiesclera. La sutura se anuda en X o en paralelo sobre la ampolla, produciendo compresión de la superficie de la ampolla, hacia la esclera. También se puede realizar needling para prologarlas hacia posterior y lateral, así al aumentar el área de filtración, esta es menos elevada. E incluso a veces será necesaria una reparación recortando la conjuntiva redundante, para recubrir la zona de filtración con nueva conjuntiva saludable, vascularizada y menos fibrosada48. Fig. 37. Figura 34. Blebitis, zona blanca de infiltración infecciosa, sobre tejido enrojecido inflamado. Figura 35. Dellen corneal infectado por ampolla filtrante de gran tamaño. Figura 36. Ampolla gigante que invade la cornea.

RkJQdWJsaXNoZXIy MTYwMjk1