Boletín HCSBA

• TEMA 2 • HEMOCULTIVOS EN PEDIATRÍA UNA MIRADA A LA REALIDAD LOCAL, ESTABLECIENDO CRITERIOS PARA RE CONTROLAR. Dra. Michelle Cea V. Médica en Programa Formación Pediatría Universidad de Chile, HCSBA. Dr. Luis Delpiano M. Pediatra Infectólogo HCSBA. Profesor Asistente Universidad de Chile. Introducción El hemocultivo (HC) es el método diagnóstico de elección ante la sospecha de bacteriemia a cualquier edad. La positividad global de los hemocultivos en pediatría varía entre 5 a 10%, siendo más alta en unidades intrahospitalarias que en aquellas de urgencia. La actual existencia de procesamiento automatizado de los HC tiene la ventaja de entregar información de positividad en un menor tiempo, con identificación de tinción de Gram antes de 24 horas de incubación en la gran mayoría de casos, lo que permite una mejor orientación y gestión terapéutica de antimicrobianos en los pacientes, siendo siempre relevante conocer la epidemiología nacional y local de los agentes identificados causantes de infecciones invasoras bacterianas y de su patrón o perfil de susceptibilidad antimicrobiana considerando el cambio epidemiológico existente secundario a la administración de vacunas contra agentes capsulados, uso de dispositivos vasculares, uso de nuevos inmunosupresores y nuevas condiciones del huésped. Los sistemas automatizados consisten en botellas con distintos medios de cultivo (aeróbicos, anaeróbicos, hongos, micobacterias) y resinas que captan antimicrobianos) en donde se recolecta la muestra de sangre (1 a 3 ml), que se incuban en equipos con temperatura estándar manteniendo una agitación constante y que poseen métodos de detección de productos del metabolismo bacteriano (CO2). Así, mediante métodos radiométricos, colorimétricos o fluorométricos continuos, determinan o detectan un umbral de producción de CO2 considerado como positividad del frasco de HC. Posteriormente, la botella positivizada se retira del equipo para efectuar una tinción de Gram que permite ya entregar una orientación clínica con un informe preliminar. Esta técnica automatizada, ha permitido aumentar la velocidad de detección del agente en desarrollo, disminuir el tiempo de respuesta y aumentar la sensibilidad de los HC. Y aunque hoy día existen otras técnicas de identificación microbiana como MALDI-TOF (espectrometría de masas) o pruebas moleculares, no es sino el HC el que entrega a ciencia cierta, además de la identificación microbiológica, la concentración inhibitoria mínima (CIM) del patógeno aislado a informar en el antibiograma, elemento crucial para guiar la indicación terapéutica con antimicrobianos. Recordar que los HC automatizados pueden detectar bacteriemias de baja carga (≤4ufc/ml), y que hoy están disponibles además los frascos para estudio de anaerobios con fuerte evidencia de utilidad respecto a la identificación de agentes anaerobios y también de aerobios facultativos. Siempre se debe considerar como relevantes en la fase preanalítica, la óptima indicación de “hemocultivar”, relacionada a una sospecha o riesgo incrementado de infección bacteriana 08 noviembre 2025. Volumen 24 - N°88

RkJQdWJsaXNoZXIy MTYwMjk1